James White se convirtió en un jugador histórico de los New England Patriots luego de su importantísima actuación en el Super Bowl LI, donde vencieron a los Atlanta Falcons, y ahora pone fin a los emparrillados.
El jugador anunció su retiro mediante su cuenta de Twitter en donde agradeció a su familia, sus compañeros de los Patriots, al head coach Bill Belichick, al dueño Robert Kraft y a toda la organización del equipo de New England.
White había firmado un contrato de dos años y 2.5 millones de dólares para regresar a New England durante el inicio de la agencia libre. Sin embargo, en julio fue colocado en la lista de imposibilitados de practicar por una lesión de cadera.
JUGADOR PERFECTO A LA OFENSIVA
Asimismo, el head coach de New England declaró, mediante un comunicado de prensa de los Pats, que White fue el jugador perfecto para su sistema ofensivo.
“James definió el término de profesional consumado. Su disponibilidad, consistencia, generosidad y su capacidad de jugar bajo presión son de élite” señaló Belichick. “Combinado con una gran inteligencia, rapidez y elusividad, James fue perfecto para nuestra ofensiva aérea”.
El producto de Wisconsin fue un RB distinto, ya que de por vida registró más recepciones (389) que acarreos (319). Su total de yardas aéreas fue de 3,278 y por tierra sumó 1,278. Asimismo, fue uno de los objetivos favoritos de Tom Brady en la zona roja ya que 24 de sus 25 TDs por recepción fueron en conexión con él.
Con la partida de White, los Patriots contarán con Damien Harris, Rhamondre Stevenson, Ty Montgomery, J.J. Taylor y los novatos Pierre Strong y Kevin Harris.
ESTABLECIÓ RÉCORDS
Aunque White ganó tres Super Bowls (XLIX, LI, LIII) durante su estancia con los Patriots, la participación más importante del RB fue en la edición LI ya que estableció los récords de puntos anotados (20) y más recepciones (14).
En total, White corrió seis veces para 29 yardas y dos TDs; y atrapó 14 pases para 110 yardas y una anotación. Asimismo, sumó dos puntos mediante una conversión de dos puntos.