Los deportistas latinoamericanos se hacen notar en Sochi. Si los resultados no acaban de llegar, sus trajes deportivos causan sensación. Las combinaciones de los argentinos Cristian y Macarena Simari Birkner y del mexicano Hubertus de Hohenlohe atraen muchas miradas.

Solo los representantes del equipo de curling de Noruega, y sus coloridos pantalones con la bandera de su país estampada, parecen hacer sombra a los latinoamericanos en esta particular lucha por las medallas de la moda.

Los esquiadores argentinos Cristian y Macarena Simari Birkner atraen muchas miradas por su combinación blanca estampada de enormes lunares negros, realizada para ellos por una marca italiana de ropa deportiva.

Por su parte, el príncipe de origen alemán Hubertus de Hohenlohe, que corre con México, país en el que nació hace 55 años, fue expresamente a Italia a intervenir en la confección de la combinación, en la que se transforma en un mariachi mexicano.

Tanto los argentinos como el mexicano buscan llamar la atención y lo intentan desde hace años en todas las competiciones en las que participan.

"Lo elegimos con la diseñadora de la firma, que se llama Mónica Gamberoni. Siempre trabajamos para hacer los trajes y tener el modelo más original", afirma Macarena Simari a la AFP.

"Ya llevamos quince años trabajando con ellos. En el circuito de la Copa del Mundo llevamos colores divertidos. Siempre tratamos de trabajar con eso, darle otro enfoque el esquí. Con este traje buscábamos el impacto que ha generado", añade.

"Trabajamos toda la familia con Mónica. Nos gustó esta combinación. Entre todas las opciones esta fue la que nos divirtió más", explica.

Su hermano Cristian afirma que en la elección intervino toda la familia Simari Birkner.

"La diseñadora sigue nuestros pedidos y nos presenta los modelos. Había cuatro o cinco y elegimos entre todos. Estábamos todos de acuerdo en este de círculos negros", explicó a la AFP.

"Había otras combinaciones más clásicas y acabamos decidiéndonos por ésta. La mayoría de los equipos tienen trajes más tranquilos. La idea era llamar un poco la atención", señaló el esquiador.

Mariachi en el eslalon

Si los aficionados de los Juegos Olímpicos ya han visto los trajes de Cristian y Macarena Simari Birkner, tendrán que esperar el penúltimo día del evento, el 22 de febrero, para ver a Hubertus de Hohenlohe lanzarse en una combinación de mariachi en el eslalon.

"Intervengo en diseño desde 1997. Como soy creativo y me gusta hacer cosas creativas, como fotografía, música y todas estas cosas, había que dar algo más, más allá de la actuación deportiva. Uno puede mandar mensajes escondidos o abiertos y pensé en la idea de diseñar trajes", explicó Hohenlohe a la AFP.

"Hace cuatro años, en Vancouver-2010, en el gigante, me puse un traje de pistolero, donde la idea era que la única forma de ganar era que yo mataba a todos en la largada y quedaba solo yo y ganaba", explica.

"En el eslalon me puse uno de todo reciclaje con el mensaje de que hoy en día podemos hacer muchas cosas con algo que hemos tirado o echado en la basura y que si cada uno ayuda un poco más, este planeta podría estar un poco más verde", añade.

Pero en Sochi-2014, Hubertus de Hohenlohe pensó en algo más representativo de México y se le ocurrió disputar la prueba con una combinación de un traje de mariachi.

"Esta vez la temática es un poco más mexicana e incluye un poco todo lo que hago yo, fotografía, música. Es muy cool y elegante. En estos trajes, cuando tengo la idea, voy a Turín, y con unos diseñadores comenzamos a ponerle estructura. Poco a poco vamos perfeccionándolo hasta conseguir algo que tenga fuerza", concluye.

Los representantes argentinos, mexicanos y noruegos han dado que hablar en Sochi más allá de sus resultados deportivos.

El argentino Cristian Javier Simari Birkner durante una sesión de entrenamiento en los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi, Rusia, el 13 de febrero de 2014

El esquiador Hubertus Von Hohenlohe dirige a la delegación mexicana durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi, Rusia, el 7 de febrero de 2014