MÉXICO, D.F.- La final de este sábado en el estadio La Luz de Lisboa vivirá un acontecimiento inédito en la historia de la Champions League, pues en las 59 ediciones que se han celebrado la de este 2014 será la primera entre dos clubes de la misma ciudad.
El cuadro merengue estará de nuevo en una final tras 12 años de no llegar al juego por el título y lo hace al terminar con uno de sus fantasmas al derrotar al casi invencible Bayern Múnich, de Alemania, en las semifinales.
El 2002 fue el último año en que los de La Casa Blanca tuvieron entre sus manos La Orejona, que fue la novena en su historia, por lo que llegarán a Portugal en busca de una revancha.
El Real llega con buenas oportunidades de llevarse este título, pues una de las grandes hazañas que hizo en esta edición fue superar la marca de anotaciones del certamen, al llegar a 37 tantos en 12 partidos, con promedio de 3.1 por ciento por cotejo y todavía le falta el enfrentamiento del sábado.
En sus actuaciones durante la fase previa a este juego, los dirigidos por el técnico Carlo Ancelotti fueron contundentes, ya que propinaron par de goleadas 6-1 al Galatasaray de Turquía en el juego inaugural y al Schalke 04 en el juego de ida de los octavos de final.
ROJIBLANCOS INVICTOS
Del otro lado del terreno de juego estarán los colchoneros, único club que se ha mantenido invicto hasta lo que va del certamen y se dio el lujo de dejar en el camino al Barcelona, Milán y Chelsea en las rondas definitivas.
Otro punto que puede motivar a los rojiblancos es que regresan a una final, luego de 40 años. En aquella ocasión el torneo se llamaba Copa de Europa y cayeron ante el Bayern Múnich.
Los dirigidos por Diego Simeone tienen un realce en su trayectoria en los más recientes años. El Atlético alcanzó su quinta final de competición europea en los últimos cuatro años, tras la conquista por partida doble de la Liga Europa y la Supercopa continental, tanto en 2010 como en 2012.
ÉPICA BATALLA
Real y Atlético ya tuvieron un enfrentamiento en el equivalente a la Champions League. Esto sucedió en el lejano año de 1959, cuando todavía la Copa era a visita recíproca.
El juego de ida fue el 23 de abril y la victoria fue para los blancos 2-1, pero el 7 de mayo, en la vuelta, los colchoneros ganaron 1-0, por lo que se fueron a un tercer encuentro.
Ese cotejo se llevó a cabo en La Romareda, cancha de los maños del Zaragoza, y allí el conjunto merengue volvió a ganar 2-1 con magníficos goles de Di Stéfano y de Puskas.
Aunque parezca increíble, el Atlético domina a su vecino de ciudad en finales de competencias oficiales. De las seis que han disputado, cuatro favorecen a los colchoneros y dos a los madridistas.
En los duelos en la actualidad se han enfrentado cuatro ocasiones, con un triunfo rojiblanco en la Liga y en La Casa Blanca; dos madridistas en las semifinales en la Copa del Rey y un empate a dos tantos en la Liga.
DOMINIO DE UN SOLO PAÍS
La primera vez que se dio la final entre dos equipos de un mismo país fue en 2000, cuando el Real Madrid venció 3-0 a los naranjeros del Valencia.
Tres años más tarde, la Juventus y el Milán se vieron las caras en el estadio de Old Trafford, en Manchester, y la victoria fue inapelable para los Rossoneros 3-2 en penales.
En 2008 fueron el Manchester United y el Chelsea que jugaron la final en Moscú y tuvieron que irse a los tiros desde los once pasos. Los Red Devils ganaron 6-5 y se recordará por el resbalón que tuvo a la hora del cobro John Terry.
La más reciente se dio hace un año, con el Bayern Múnich y el Borussia Dortmund. El equipo rojo venció a su acérrimo rival 2-1 con gol del holandés Arjen Robben a dos minutos del final.