Esos 5 minutos más de sueño, cuando ya debes levantarte, en lugar de ayudarte podrían tener repercusiones en tu salud y en tu desempeño durante el día, además de ponerte a correr para no llegar tarde a la escuela o trabajo.
Pensar que 5 minutitos más de sueño al levantarte son buenos y que se prefieren a desayunar en calma o disfrutar mejor de un baño reparador no ayudan en nada, ya que esto interrumpe las fases del sueño que se necesitan para completar un descanso completo. Así que al sonar el depertador, abre los ojos, estira deliciosamente el cuerpo y de inmediato ponte de pie, para empezar un productivo y saludable día.
El sueño presenta varias fases:
• Fase 1, es cuando se presenta el sueño ligero, aun se pueden percibir sensaciones como sonidos, luz y se busca la postura más cómoda para descansar. Dura más o menos 15 minutos desde que cerramos los ojos.
• Fase 2. Es una transición a un sueño profundo, en esta fase el sistema nervioso bloquea el acceso sensorial. El descanso es parcialmente reparador, pero no suficiente para ser completo en los 20 minutos que dura la fase.
• Fase 3. Es cuando se presenta el sueño delta, este es profundo aunque durante él no se presentan sueños. Si una persona despierta entre los 5 a 20 minutos que dura esta fase padecerá confusión y desorientación.
• Fase 4. En esta etapa se presenta el mayor sueño profundo, que es el necesario para la recuperación física y mental y tiene una duración de por lo menos una hora.
• Fase REM (Rapid Eye Movements). Durante esta fase se presenta un rápido movimiento de los ojos y es la fase durante la cual se proporciona descanso al cuerpo y muchas veces aparecen los sueños. Su primera aparición es de 10 minutos y su última alcanza entre 30 a 40 minutos.
Normalmente, este ciclo se repite durante la noche unas 4 o 5 veces en intervalos de hora y media. Pero cada vez que vuelves a dormir por la mañana el ciclo vuelve a iniciar y al ser interrumpido rápidamente por la alarma puede evitar el descanso total y favorecer somnolencia durante el día y reducción en la memoria, tiempo de reacción, comprensión y atención durante todo el día.
Al comienzo del sueño tu cuerpo segrega serotonina en tu torrente sanguíneo. La serotonina es un neurotransmisor (sustancia química con la cual se comunican las neuronas) que tiene un efecto de bienestar y felicidad, sensaciones que embargan a tu cuerpo mientras duermes. Una hora antes de abrir los ojos, el cerebro envía señales para liberar dopamina, neurotransmisor que suprime la sensación de sueño y te prepara para levantarte.
Posponer la alarma por la mañana se siente bien porque se vuelve a liberar serotonina; no obstante, las sustancias que te ayudan a despertar (dopamina, así como las hormonas cortisona y adrenalina) siguen en tu cuerpo y esto puede generar señales que te confunden o dejan desorientado por la mañana.
Esta sensación es conocida como inercia del sueño, un estado en el que se siente no haber despertado del todo y en el que las destrezas motoras están disminuidas. La duración varía generalmente de 5 a 20 minutos, aunque puede alcanzar hasta 4 horas, y se suele experimentar al despertar abruptamente.
Si constantemente tienes ganas de dormir todo el tiempo toma en cuenta que no serán los 5 minutitos (que a veces se convierten en media hora más), los que te ayudarán sino medidas como las siguientes:
• Acuéstate más temprano hasta que encuentres las horas necesarias de descanso que requieres para despertar naturalmente.
• Pon la alarma a la hora a la que en realidad te levantas. Con esto evitarás dormir más por la mañana, así como la privación de sueño.
• Coloca la alarma lejos de la cama. Si el despertador no se encuentra a tu alcance, forzosamente tendrás que levantarte a apagarlo, y una vez fuera de la cama, podrás vencer tus ganas de volver a acostarte.
• Mejora tus hábitos de sueño. Ve a la cama y levántate de ésta a la misma hora todos los días, incluso, los fines de semana. Puede ser difícil al principio, pero con el tiempo, te acostumbrarás.
• Toma el sol. Exponerte a una hora de luz natural al día puede ayudarte a sincronizar tu reloj interno con el ciclo de día y noche.
• Recompénsate. El cerebro responde a los incentivos, una actividad mental agradable al despertar, como tocar un instrumento musical o revisar tus redes sociales, reduce las posibilidades de querer volver a dormir, pero esto no lo hagas cuando te vas a dormir.
Lo recomendado es que un adulto duerna entre 7 a 9 horas de sueño y existen diversos problemas que impiden dormir bien, si por algo no puedes hacerlo consulta un especialista para que sepan cuál es tu problema y te ayude a resolverlo, no dormir adecuadamente puede ocasionar enfermedades, accidentes, baja productividad escolar o laboral, irritabilidad y otros problemas.