La policía autonómica catalana detuvo ayer al presunto autor de la agresión racista en el Metro de Barcelona la noche del sábado contra un joven originario de Mongolia. El arrestado es un menor de origen ruso al que se le imputan delitos de lesiones y odio y discriminación.
Otras dos personas, una de las cuales también es un menor, están imputadas en relación con estos hechos como coautores de los hechos y han sido citadas a declarar.
La agresión fue grabada por una persona que acompañaba al agresor, que colgó el domingo el video en Youtube, y cuyo perfil de Twitter ha sido borrado después de hacer un comentario en el que afirmaba ser el autor de la filmación y que el agresor era un “camarada ruso”.
En la grabación, se puede ver cómo un chico rubio con la cara pixelada increpa a un joven con rasgos asiáticos y comienza a darle puñetazos, hasta que otros pasajeros consiguen separar al agresor del joven, que es empujado del convoy en la siguiente estación.