El cohete Antares de la empresa estadounidense Orbital Sciences que transportaba la cápsula no tripulada Cygnus hacia la Estación Espacial Internacional (EEI) explotó unos segundos después de su lanzamiento en la noche del martes.
"No hubo heridos y no falta nadie del personal de la base", indicó la Nasa en su sitio internet.
"La explosión se produjo poco después del lanzamiento", había explicado un poco antes el comentarista de televisión de la Nasa, que transmitía en directo las imágenes del disparo desde el centro espacial de Wallops, en la costa de Virginia, este de Estados Unidos.
Se trata del primer accidente desde que la Nasa comenzó a recurrir al sector privado para abastecer a la EEI.
En la transmisión se ve cómo el cohete se incendia unos segundos después del despegue y cae en medio de unja explosión que proyecta una bola de fuego y restos del aparato hacia el cielo.
"Perdimos el lanzador Orb3", dice el comentarista, precisando que "parecería que la destrucción se limitó a la rampa de lanzamiento".
En un breve comunicado publicado en su sitio internet, la Nasa indica "que un disfuncionamiento se produjo poco después del despegue" y promete difundir nuevas informaciones cuando sea posible. La agencia espacial dice que está trabajando "junto a Orbital para reunir todos los datos acerca del fracaso de la operación".
Orbital señaló por su lado en un mensaje en Twitter que "hubo una anomalía en el lanzador".
La cuenta atrás se había desarrollado sin problema, en condiciones meteorológicas prácticamente ideales.
Se trataba del primer lanzamiento nocturno del cohete Antares y del tercero de la misión de abastecimiento de Cygnus hacia la Estación Espacial Internacional (EEI, por sus siglas en inglés)
La cápsula Cygnus estaba destinada a llevar una carga de 2.2 toneladas hacia la EEI.
El lunes el lanzamiento había sido pospuesto por 24 horas a causa de la presencia de un buque en el Atlántico, dentro del perímetro de seguridad determinado para la operación.
Orbital Science suscribió con la Nasa un contrato de abastecimiento a la ISS por 1.900 millones de dólares en una docena de misiones.
La Nasa firmó también un contrato por mil 600 millones de dólares con SpaceX para realizar 12 misiones hacia la EEI.
La Nasa apostó a SpaceX y Orbital para reemplazar a las naves espaciales. cuyo último vuelo tuvo lugar en julio de 2011, con el fin de reabastecer a menor costo a la estación orbital y un día poder transportar hacia allí astronautas.
En septiembre pasado, la Nasa seleccionó a SpaceX y a Boeing para construir las dos primera naves espaciales privadas de transporte de personas hacia la ISS y potencialmente hacia otros destinos orbitales.
El contrato fue por un total de 6 mil 800 millones de dólares. Boeing percibió 4 mil 200 millones para desarrollar su nave, el CST-100, y SpaceX 2 mil 600 millones por su cápsula Dragon V2.
Los primeros vuelos de estas naves de siete plazas están previstos para 2017, y permitirán a Estados Unidos dejar de depender de los Soyuz rusos para transportar a sus astronautas hacia la EEI.