Cientos de miles de personas permanecían hoy sin energía eléctrica en varios estados del sur de Estados Unidos y muchas ciudades recuperaban su ritmo normal tras el paso de una nueva tormenta invernal que obligó al cierre de oficinas y escuelas.
En la zona metropolitana de la capital del país, cuadrillas de limpieza fueron desplegadas en condados de Maryland, Virginia, además de la ciudad de Washington desde la noche del lunes y hasta la madrugada de este martes, en un esfuerzo por mantener las principales calles, avenidas y autopistas en condiciones transitables.
A pesar de ello, las ocho pulgadas de nieve que cayeron en algunas zonas obligaron al cierre de las oficinas de gobierno, tanto federal como estatal, así como la mayoría de las escuelas, ante la imposibilidad de los autobuses escolares y de transporte público para transitar por calles secundarias cubiertas por nieve.
La nevada que empezó a precipitarse desde la noche del lunes, fue acompañada posteriormente por hielo, cuya presencia fue especialmente peligrosa en puentes y pasos a desnivel.
Debido a las bajas temperaturas, que en el caso de esta capital alcanzaron hasta los 17 grados centígrados bajo cero, las autoridades recurrieron a arena mezclada con sal para mantener calles y autopistas transitables, debido a la poca efectividad de químicos disolventes en tales condiciones.
El frente frío proveniente del oeste afecto una amplia porción del sur y el este de Estados Unidos, complicando en algunos casos la situación provocada por la banda de nevadas que han afectado estados de la costa noreste desde el mes pasado.
En Kentucky, Tennessee, Carolina del Norte y Virginia, las autoridades declararon el estado de emergencia a fin de facilitar las tareas de limpieza frente a precipitaciones que en casos de ciudades como Lexington, Kentucky, alcanzaron hasta las 10 pulgadas.
Las inusuales precipitaciones que registraron algunas zonas provocaron apagones tras la caída de líneas del tendido eléctrico, las cuales cedieron ante el peso de la nieve y el hielo, o fueron derribadas por ramas que se desprendieron de árboles.
En Tennessee las autoridades reportaron en un punto más de 50 mil hogares sin electricidad, en tanto que en Georgia y las Carolinas la cifra máxima se ubicó en un momento en 200 mil y apenas 15 mil en Missisipi.
Se espera que el frente se haya disipado esta tarde, aunque para entonces su paso habrá complicado aún más la situación para algunas comunidades del noreste que han recibido decenas de pulgadas de nieve desde enero pasado.
En el caso de Boston las poco más de cuatro pulgadas que la ciudad recibió el las pasadas horas colocó en 95 pulgadas el total acumulado que la ciudad ha recibido en las pasadas cinco semanas, y con ello se estableció una nueva cifra récord.