Un ex agente de la DEA puso al rojo vivo la campaña para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Perú, a celebrarse el domingo 5 de junio, tras presentar una prueba de audio en la que supuestamente se oye al secretario general del partido de Keiko Fujimori, el congresista Joaquín Ramírez, jactarse de haber lavado 15 millones de dólares en efectivo que la candidata le entregó para que financiara su campaña electoral de 2001, cuando perdió contra Ollanta Humala.
“Es mi deber como peruano denunciar a esta gente. No quiero que mi país caiga en malas manos, que se sepa la verdad, he venido por mi propia voluntad”, dijo Jesús Francisco Vásquez en Miami a las cámaras de Univisión y de América Televisión, en un reportaje difundido en Perú la noche del domingo.
Vásquez indicó que empezó a colaborar con la agencia antinarcóticos estadunidense en 2006 y que, como parte de una operación encubierta, su misión era grabar las conversaciones que tuviera con Ramírez. “Me dieron una grabadora que la tenía en el bolsillo”, relató a Univisión.
La DEA lo niega. El periodista Gerardo Reyes, de la cadena estadunidense en español, pidió a la DEA confirmar si había una investigación acerca de los audios del político fujimorista. “Es una investigación delicada, está en curso y no podemos hacer ningún comentario”, respondió la vocera de la entidad Anne Judith Lambert.
Sin embargo, tras estallar el escándalo en Perú, la DEA emitió un escueto comunicado en el que se limitan a indicar que Fujimori ni está siendo investigada, ni lo ha estado con anterioridad.
“A tres semanas…”. Fujimori rechazó “categóricamente” haber entregado dinero a su mano derecha en el partido y dijo que lamenta que la denuncia “se dé tres semanas” antes de las elecciones “cuando se supone que [el caso] está siendo investigado desde hace tres años”.
La candidata populista no dudó en calificar el escándalo de “guerra sucia” montada por sus adversarios.
Tras sentirse aludido, su rival en la segunda vuelta, Pedro Kuczynski, afirmó que no impulsa “ninguna guerra sucia” y que se trata de “acusaciones ridículas” por lo que recomendó a la hija del encarcelado ex presidente Alberto Fujimori “que deje de decir estupideces”.
“Hay que tener un carácter muy simpático como el mío para tolerar este tipo de temas”, declaró Kuczynski, quien añadió al respecto que le parece “muy grave, sin duda”, la información sobre Ramírez y agregó que “por eso se debe investigar”.
“Marca Fujimori”. La primera dama de Perú, Nadine Heredia, líder del partido Nacionalista, no dejó de pasar la ocasión para señalar que el “narcotráfico y lavado [de dinero] son marca personal de fujimorismo”.
A través de su perfil en Twitter, la esposa del mandatario peruano, Ollanta Humala. agregó: “Hoy, Joaquín Ramirez antes, Calle Quiroz. Ambos financistas”.
Heredia aludió a Luis Santiago Calle Quiroz, un aportante en la campaña electoral de Fujimori en 2011, que está siendo investigado en Estados Unidos por lavado de dinero del narcotráfico.
La esposa del presidente peruano envió otro tuit en el que manifestó que “La DEA investiga al principal financista de Keiko. Ojalá que en Congreso y Fiscalía no sigan con guantes de seda”.