Bagdad.- Al menos 11 personas murieron hoy, entre ellos seis soldados del Ejército iraquí, en un atentado suicida en una aldea cercana a la norteña ciudad de Mosul, presuntamente perpetrado por combatientes del Estado Islámico (EI).
El atentado se registró esta mañana en la aldea de Ajhala, ubicada a unos 60 kilómetros al sur de Mosul, y fue perpetrado por uno de varios militantes del EI con cinturones explosivos, que pretendían realizar ataques en serie.
“Algunos bombarderos fueron muertos a tiros por las fuerzas iraquíes, aunque otros lograron escabullirse y hacerse estallar", destacó Saleh al-Jabouri, responsable del gobierno local, según un reporte de la cadena árabe Al Bawaba.
En declaraciones a la prensa local e internacional, el funcionario confirmó la muerte de un total de 11 iraquíes, cinco civiles y seis soldados del Ejército, en el ataque suicida de este domingo, tras destacar que existe el riesgo de más ataques.
"Las fuerzas de seguridad están aún buscando a cuatro bombarderos que se colaron en el pueblo", dijo al-Jabouri.
El atentado se registró en momentos en que las fuerzas iraquíes están preparando lanzar una gran ofensiva para recuperar el control de la ciudad de Mosul, que está desde 2014 en menos del grupo extremista radical, también conocido por Daesh, su acrónimo en árabe.
Irak ha sufrido un devastador vacío de seguridad desde mediados de 2014, cuando el EI capturó vastas extensiones de territorio en el norte y occidente del país, y pese a que el Ejército iraquí ha conseguido retomar parte del territorio, el grupo controla aún varias partes.
El Estado Islámico surgió en 2003 como una rama de la red Al Qaeda, aunque después se separó y tomó el control de amplias zonas de Siria e Irak, en donde en junio de 2014 estableció un califato dirigido por su máximo líder Abu Bakr al Baghdadi, quien se presume ha muerto.
El grupo yihadista es conocido por los crímenes atroces que comete en nombre del Islam, como decapitaciones y lapidaciones y ha sido responsable de innumerables atentados.