Una persona falleció y otras tres resultaron heridas por la explosión de una bomba en una oficina del Partido Comunista en la región noroccidental china de Xinjiang, tras la que la policía abatió a los cuatro presuntos atacantes.
Las autoridades locales, citadas por la agencia oficial Xinhua, calificaron de ataque terrorista este suceso, que tuvo lugar a las 16.50 hora local (08.50 GMT) en el condado de Qaraqash (Moyu, en mandarín) de Xinjiang.
Los supuestos atacantes irrumpieron con un vehículo en las instalaciones del comité del Partido Comunista de China (PCCh) en ese condado y detonaron un artefacto explosivo, según Xinhua.
La policía mató a los cuatro responsables del ataque que, según la cadena de televisión oficial CCTV, eran terroristas suicidas.
El comité del PCCh de Xinjiang, que tardó varias horas en informar de lo sucedido, señaló en un comunicado que el orden social local se mantenía "estable", sin proporcionar más detalles.
La región de Xinjiang, hogar de la minoría étnica musulmana uigur, es un foco habitual de conflictos, que Pekín vincula con grupos secesionistas como el Movimiento del Turkestán Oriental (ETIM, siglas en inglés) influidos por yihadistas de países vecinos.
Por su parte, grupos de uigures en el exilio culpan a la represión que afirman sufrir por parte del régimen comunista de una violencia que se ha extendido a otras partes de China en los últimos años.