Ciudad Juárez.- Un grupo armado asesinó a ocho integrantes de una familia en Ciudad Juárez, Chihuahua: dos niñas de cuatro años de edad, un niño de seis, tres mujeres y dos hombres adultos, informó la Fiscalía General del Estado (FGE).
Agentes de la policía ministerial investigadora dijeron que los asesinos rompieron las chapas e ingresaron a la casa probablemente por la noche para ultimar a la familia con armas blancas, ya que ningún cuerpo tiene impactos de balas.
Peritos del Servicio Médico Forense (Semefo) informaron que encontraron muertos en una recámara a Valeria Lara Castañeda y Abril Romero Castañeda, ambas de cuatro años, y a Daniel Romero Castañeda, de seis. En la sala estaba tirados Rubén y Daniel Romero, de 28 y 60 años, respectivamente.
A María del Carmen Morales Infante, de 60 años, la encontraron tirada en la cocina; a Rosa María Castañeda Morales, de 30, en una recámara, y a María del Carmen Castañeda Morales, de 28, sobre una cuna donde dormía su hija de dos meses.
Durante horas no se supo el paradero de la menor, pero por la tarde se informó que una vecina la recuperó viva cuando encontraron los cuerpos.
Los cadáveres estaban atados de pies y manos y la boca la tenían cubierta con cinta adhesiva gris, similar a la que utilizan integrantes del crimen organizado para inmovilizar a sus víctimas. El Semefo afirmó que los asesinatos se cometieron con armas blancas. No se escucharon disparos y no hay casquillos percutidos, indicó una fuente de la FGE.
El ataque ocurrió entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, en una casa ubicada en el cruce de las calles Luciano Becerra y Fernando Montes de Oca, en la colonia Morelos Zaragoza, al sur de Ciudad Juárez.
Según testimonios recabados por la policía, los cuerpos fueron descubiertos debido a que un grupo de la comunidad religiosa Testigos de Jehová fue a la casa de la víctimas porque no llegaron a los servicios religiosos como acostumbraban.
Los primeros en atender el llamado de auxilio fueron policías municipales, quienes acordonaron la zona y dieron a conocer que no encontraron evidencia de que hayan robado a los integrantes de la familia.
Vecinos indicaron que el propietario de la casa, a quien conocían como Max, se dedicaba a la venta de automóviles. En el patio de la vivienda había cuatro vehículos. Se investiga si tienen reporte de robo.
Jorge González Nicolás, fiscal general del estado, expresó que no hay una línea sólida de investigación, pero que comisionó a un grupo numeroso de agentes para recopilar evidencias. Éste se encuentra bajo el mando de Enrique Villarreal Macías, fiscal especial para la investigación y persecución de delitos.
Para el funcionario, el hecho es de alto impacto y se tiene que manejar con cuidado el trabajo de investigación.
Recientemente, tras el asesinato de una mujer que tenía siete hijos, a tres cuadras de donde ocurrió este crimen, los vecinos pidieron vigilancia policiaca y no la recibieron.
El pasado 30 de septiembre, en el poblado San Isidro, en el valle de Juárez, ejecutaron a 10 personas a balazos, entre ellas cuatro menores de edad, asesinato que sigue impune.