La Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), lanzo el informe del “Análisis de contexto del caso Nayarit”, durante el sexenio (2011-2017) de Roberto Sandoval, en donde se precisa la relación que sostenía el gobernador y el fiscal, Edgar Veytia con el Cartel de los Beltrán Leyva.
En este informe se señala que la estructura criminal comenzó a generarse con la creación de la Policía Nayarit en 2011, después, el 22 de enero de 2013, se dio la transformación de la Procuraduría General de Justicia del Estado a una Fiscalía y más tarde en septiembre de 2015, la función de seguridad pública con el "mando único" quedó bajo el control de la Fiscalía, lo que permitió que Veytia tuviera en sus manos las Policías Municipales y Estatal mismas que puso al servicio de las células criminales, al igual que armas, vehículos, un helicóptero y tanquetas.
En esta investigación se encontraron momentos claves que permiten entender la relación de Roberto Sandoval Castañeda y de Edgar Veytia con el crimen organizado, el primero comprende el periodo 2011-2016 y el segundo se identifica en 2017.
En el primer periodo la dupla Sandoval-Veytia, pacta con el Cartel de los Beltrán Leyva para operar a su favor. EI "diablo" como se le conocía a Edgar, ayudó a Los Beltrán Leyva a "limpiar" la zona a cambio de 5 millones de dólares. Para este trabajo los Beltrán Leyva también se aliaron con Los Zetas. En ese tiempo Veytia creó la Policía Nayarit, cuyos efectivos encapuchados los puso al servicio de los dos grupos delincuenciales y brindó seguridad a los capos, Héctor Beltrán Leyva, al H2 y al Chapo Isidro.
La alianza entre la FGEN y el gobierno del Estado se rompe luego de que el Cartel de los Beltrán Leyva, participara en Sinaloa en un ataque contra el Ejército. Este hecho fue uno de los varios que marcó su debacle.
Por su capacidad operativa, El Chapo lsidro mantenía cerca al H2, quien operaba varios grupos en dicho Estado. En septiembre de 2016, lideró en Culiacán la emboscada a un convoy del Ejército en la que murieron seis militares y ocho más resultaron heridos, convirtiendo al H2 en un objetivo militar.
Las autoridades estatales con las que había estado coludido el H2, vendieron la plaza al CJNG y, el jueves 9 de febrero de 2017, dieron a conocer su ubicación a la Marina y tras la "Operación Barcina", ese día el H2 y siete de sus sicarios fueron abatidos, entre ellos, su segundo al mando, Daniel Silva Gárate alias el H9.
En informe establece que apenas unos meses después de la muerte del H2 y el H9, el grupo de Los H se dispersó y surgieron dos nuevas células, una encabezada por el excomandante de la policía Nayarit, Luis Antonio Torres Valdivia y otra por Yahir Patrón, hijo de Patrón Sánchez, el H2.
A principios de septiembre de 2017, grupos armados se presume, de los Beltrán Leyva, le advierten al CJNG que harán una limpia de los "extorsionadores" del grupo vinculado con Veytia, se cree para vengar la muerte del H2, por lo cual se observa un incremento de desapariciones forzadas.