El barco de servicios petroleros más grande del mundo, ’OSA Goliath’, propiedad de la empresa Oceanografía, huyó de la PGR, que aseguró a ésta empresa la semana pasada, pues la investiga por fraude y lavado de dinero.
De acuerdo con el diario Reforma, ‘Goliath’ es el principal activo de la empresa: está valuado en 245 millones de dólares.
El barco no pudo ser asegurado físicamente por la Procuraduría porque el pasado viernes su tripulación fue avisada de la intervención de la compañía y ya no regresó a las costas de Campeche.
Al respecto, la firma noruega Norsk Tillitsmann informó que busca vender el barco y con ello saldar un adeudo de la empresa de Amado Yáñez derivado de su incumplimiento con un bono que emitió por 160 millones de dólares.
Como fiduciarios del bono, los nórdicos difundieron en su portal de internet dos cartas de su directivo Fredrik Lundberg en la que señalan que, en octubre, ‘OSA Goliath’, subsidiaria de Oceanografía con domicilio fiscal en Singapur, emitió este bono y puso como garantía la propiedad de la nave.
El 28 de febrero, según la empresa noruega, Oceanografía no cubrió el arrendamiento de la embarcación y cayó en un evento de incumplimiento, razón por la que Norsk ejerció sus derechos sobre el barco.
La fecha en que la firma noruega dice haber tomado el control del buque es la misma en que la PGR aseguró la empresa de Yáñez en Campeche. Sin embargo, las cartas donde Norsk da a conocer su intervención están firmadas hasta el 4 y 5 de marzo.
El viernes, cuando la PGR intervino las instalaciones de Oceanografía en Campeche, se esperaba que el OSA Goliath anclara en las costas de la entidad a lo largo del día, pero la embarcación no regresó y se dio la huida.
Bloomberg informó ayer que el barco se encuentra en aguas internacionales frente a Ciudad del Carmen.
El barco era presumido hasta en internet, por la propia Oceanografía:
Acecha la liquidación
El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) tomó las instalaciones de Oceanografía con el objetivo de cerrar la empresa, señaló la dependencia. “Se están llevando las tareas para cerrarla”, confirmó el organismo al diario El Financiero.
El SAE se rige por la Ley Federal para la Administración y Enajenación de Bienes del Sector Público, dentro de la cual regula, entre otras cuestiones, precisamente la liquidación y enajenación de los bienes a disposición del gobierno federal.