Ciudad de México, 11 de junio (SinEmbargo).– Andrés Manuel López Obrador y Jaime “El Bronco” Rodríguez Calderón están vivos. O, más bien, son los aventajados para las presidenciales de 2018, luego de sus respectivos triunfos: uno, colocando a Morena en la escena nacional; el otro, ganándole a todos los partidos desde el hartazgo de la gente, sin dinero y sin grandes plataformas.
Eso es lo que ven en sus ediciones de hoy The Financial Times y The Economist, dos de los medios que, junto con The Wall Street Journal, Forbes, Reuters o Bloombers forman la opinión de los líderes no sólo empresariales y financieros, sino también políticos del mundo.
The Economist argumenta que en las elecciones del Congreso, el PRI, del Presidente Enrique Peña Nieto, así como PRD y PAN, perdieron peso en votos aunque ganaron suficientes escaños. Un nuevo partido de izquierda, Morena, recogió el 8 por ciento de los votos; y el “líder-insignia, Andrés Manuel López Obrador, ahora se convierte en un principal contendiente a la presidencia en 2018”.
“Aunque Peña tiene el poder para seguir adelante, hay dos grandes cuestiones. En primer lugar, no tiene mucho tiempo y no puede postularse para la reelección. López Obrador, quien perdió dos elecciones presidenciales, pero que podría ganar una tercera, es un opositor feroz de las reformas. E independientes impredecibles, como Jaime Rodríguez, el nuevo Gobernador de Nuevo Léon, pueden tener ambiciones presidenciales”, dice la revista británica.
“La segunda cuestión es si el Sr. Peña tiene la voluntad para ver a través de las reformas. Su enemigo inmediato un sindicato amafiado de profesores, conocido como la CNTE, que expresó su oposición a los cambios en la educación mediante el secuestro de las estaciones de servicio y amenazando con impedir que la gente votara en los estados del sur. En una aparente derrumbe, el gobierno suspendió la evaluación de maestros, la parte más importante de la reforma, justo antes de las elecciones. El boicot fracasó, y la suspensión se levantó el 8 de junio. Pero la oscilación hizo daño. Juan Pardinas, del Instituto Mexicano de Competitividad (grupo de expertos), dijo que se envió el ‘escalofriante mensaje’ de que el gobierno no respetó el Estado de Derecho”, agrega.
“Para reparar su credibilidad, Peña puede ahora tomar medidas enérgicas. Un funcionario dice que 30 mil soldados y otros funcionarios del orden federal fueron desplegados para vigilar las elecciones en el sur, sobre todo en Oaxaca, donde la CNTE es más fuerte. Ellos todavía están allí. El Secretario de Defensa habló recientemente sobre la Reforma Educativa, una pista, tal vez, de que él puede usar las tropas para hacerla cumplir”.
Otra prueba para Peña será la divulgación, a mediados de julio, de ofertas para los primeros contratos de petróleo bajo la Reforma Energética, que permitirá a las empresas privadas invertir en la industria por primera vez desde 1938. “Esto mostrará si el apetito de los inversionistas sigue humedecido por la caída de los precios del petróleo; también puede reflejar lo mucho que confía en su gobierno para cumplir los contratos”.
“López Obrador, rejuvenecido por el éxito de Morena, pasará los próximos tres años argumentando que los reveses electorales sufridos por los grandes partidos muestran que la reforma es impopular. Esto puede no ser verdad. Rodríguez, “ El Bronco” arremetió principalmente contra la corrupción. Encuestas de salida del PRI mostraron que los que votaron por él lo hicieron porque les gustaba las reformas”.
“Pero el señor López Obrador, o AMLO, como se le conoce en caso contrario, pueden causar problemas. Si se ve que es un fuerte candidato para suceder al señor Peña, podía poner una zancadilla a los inversionistas, dice Damian Fraser, de UBS. ‘La incertidumbre creada por un resurgimiento de AMLO podría tener más de un efecto que el riesgo de protesta en las calles’”, le dijo el analista a The Economist.
LO MISMO FINANCIAL TIMES
“El gobierno de Enrique Peña Nieto no puede sentirse satisfecho con los resultados del domingo pasado o hacer como que no pasó nada porque eso implicaría ignorar el mensaje principal de las elección: que los partidos tradicionales, como el Partido Revolucionario Institucional (PRI), deben renovarse o correr el riesgo de desaparecer”, publica este día The Financial Times en un editorial.
En el artículo dice que todo esto podría presagiar el surgimiento de un candidato ciudadano para el proceso electoral del 2018. “Un ‘Bronco’ o, más preocupante, un Andrés Manuel López Obrador”.
“No sería la primera vez en América Latina, después de todo. En su forma más extrema, hace 15 años, en medio de una liberalización radical del petróleo, los venezolanos rechazaron su sistema político corrupto y fallido para elegir a un desconocido, Hugo Chávez, quien se comprometió a barrer el viejo orden, y lo hizo. Pero eso no terminó bien”, señala.
“Los riesgos sin duda están ahí. La economía puede repuntar tan pronto como las reformas den fruto, y mantener a flote las posibilidades electorales del PRI en 2018. Pero por ahora la recuperación, prometida desde hace tiempo, sigue siendo lenta y parece que nunca llegará. La situación de seguridad también es difícil; varios candidatos fueron asesinados durante la campaña electoral. Y más escándalos de corrupción podrían surgir en torno a figuras clave del gobierno, alimentando aún más el mal humor del electorado”, dice el artículo del diario británico.
Precisa que Enrique Peña Nieto “ha soportado tres años agotadores como Presidente de México”, principalmente porque el país ha sufrido “una violencia terrible y un creciente descontento social”. Explica además que su popularidad “se ha derrumbado” en medio de una serie de escándalos de corrupción.
“El domingo, en lo que el propio Peña Nieto llamó un referéndum sobre su mandato, los mexicanos votaron en unas elecciones intermedias estrechamente vigiladas, cuyos resultados han generado cierta ansiedad. Aunque su partido lo hizo relativamente bien, el voto ha reavivado las preocupaciones sobre lo que podría ocurrir en las elecciones presidenciales de 2018″, opina el medio.