La Secretaría de Relaciones Exteriores confirmó hoy que son ocho los mexicanos fallecidos en el ataque a un grupo de turistas perpetrado por fuerzas de seguridad egipcias en el desierto occidental.

La directora de Protección a Mexicanos en el Exterior, Reyna Torres, explicó a Imagen Radio que en principio solo confirmaron la muerte de dos turistas porque lograron identificar "plenamente" sus restos en el hospital al que fueron trasladados tras el ataque.

Sin embargo, apuntó, en el caso de los seis restantes "hace apenas unas horas" tuvieron acceso a los cadáveres, que habían sido llevados a otra morgue, para llevar a cabo la identificación.

Dijo que "desde el minuto uno" tuvieron la lista de los 14 mexicanos que fueron atacados, pero argumentó que fueron "reservados" porque no podían "dar cuenta de estas (últimas seis) personas" porque no habían "tenido a acceso a ningún medio" que les permitiera "identificarlos".

Los seis mexicanos que sobrevivieron al ataque se encuentran internados en el hospital de Dar al Fouad, en las afueras de El Cairo, su condición es "estable con un pronóstico positivo" e incluso uno de ellos "podría ser dado de alta en las próximas horas", añadió.

"Varios de ellos sufrieron quemaduras o tienen restos de las esquirlas de las bombas", detalló Torres, quien explicó que en el avión presidencial mexicano enviado en las últimas horas a El Cairo para asistir a las víctimas viajan dos médicos de la Secretaría de Salud, a fin de valorar el estado de los heridos.

Los galenos valorarán si los lesionados pueden ser repatriados a la aeronave en la que se desplaza la canciller, Claudia Ruiz Massieu, ocho familiares de las víctimas y expertos de la policía científica que ayudarán en la identificación de los cuerpos, comentó.

La ministra, dijo Torres, "lleva el doble mandato de acompañar a las familias, ayudarlas en este proceso (...) y de entrevistarse al más alto nivel con las autoridades para que den cuenta de los avances que ha habido en estos días de la investigación".

El Gobierno mexicano ha pedido que la investigación sea expedita y transparente, con el fin de poder saber "a la mayor brevedad" lo que pasó, aseguró.

En el ataque también murieron cuatro egipcios, entre ellos un guía turístico, de acuerdo con el Gobierno de Egipto, que explicó que las fuerzas de seguridad confundieron a los turistas con terroristas que perseguían en el desierto occidental.