Tijuana.- El 24 de mayo de 1993, fue asesinado en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara, el arzobispo Juan Jesús, Posadas Ocampo. Murió a causa de 14 impactos de bala.
Su asesinato, originó una serie de rumores, hipótesis y versiones oficiales, en un inicio la versión oficial se dividió en dos: la primera fue víctima del pleito a bala entre lugartenientes del Cártel de Sinaloa y otros de los Hermanos Arellano Félix, la otra es que fue confundido con “El Chapo” Guzmán por miembros del Cártel Arellano Félix.
Aunque la Procuraduría General de la República dijo que la investigación continúa, en la práctica se demuestra lo contrario, a 23 años de su muerte el autor o los autores así como sus motivos, nunca fueron identificados.
Aunque el entonces procurador, Jorge Carpizo McGregor (Q.E.P.D), sostuvo que el religioso murió en “fuego cruzado”, el dictamen forense y las pruebas balísticas demostraron lo contrario, el auto recibió 57 disparos, todos fueron directos contra sus tripulantes. Entonces surgió otra hipótesis, “confusión”, dicha teoría se fortaleció gracias a la detención de Jesús Alberto Bayardo Robles “El Gory”, pues en su declaración argumentó que el objetivo era terminar con la vida de un tal “Chapo”, en aquel entonces dicho apodo pasaba desapercibido.
Para el año de 1997, “El Gory” fue trasladado a Estados Unidos, donde años más tarde, confesó que en México fue obligado a mentir y que la muerte del cardenal estaba vinculada a documentos que poseía, donde involucraba a altos funcionarios con jefes del crimen organizado, aunque esta versión tampoco fue comprobada.
En 1998 surgió otra versión, el cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñíguez, insistió al entonces procurador, para la creación de un Grupo Interinstitucional, quienes se encargarían de esclarecer el crimen.
En una publicación de Proceso, se dio a conocer que el obispo de Nezahualcóyotl, José María Hernández González, confirmó que Posadas Ocampo, fue invitado a una comida en Los Pinos, en mayo de 1993, donde se trataron “puntos muy delicados”.
Según el obispo, Hernández González, los motivos del asesinato pudieron originarse en un reclamo por parte de Posadas al entonces presidente, Carlos Salinas de Gortari, porque su familia supuestamente estaba involucrada en el narcotráfico.
El salto a la “fama” de Joaquín Archivaldo “El Chapo” Guzmán Loera
La leyenda del capo, líder del Cártel de Sinaloa, inició a raíz del asesinato del cardenal. “El Chapo” era un narcotraficante desconocido, no tenía la fama, prestigio o fortuna que tiene en la actualidad.
Su poderío se concentraba en el trasiego de cocaína a Estados Unidos, pero no era el que más poder tenía, antes de él, estaban los Arellano Félix, Ignacio “Nacho” Coronel y el mismo Ismael Zambada.
El 11 de junio de 1993, fue capturado por primera, acusado por el asesinato de Posadas, pero 8 años después decidió fugarse y en el lapso de fugitivo, fue cuando consiguió el poderío que en la actualidad tiene el Cártel de Sinaloa.
Después del asesinato del cardenal, ha sido capturado 3 veces, en ninguna de sus detenciones ha aportado algo a la investigación y expediente de Juan Jesús Posadas Ocampo, así que la muerte del obispo sigue sin tener una versión oficial.