Ciudad de México.- El modelo de atención a víctimas debe revisarse para que apoye de manera efectiva a los afectados por un delito y tengan fácil acceso a la reparación del daño y asistencia legal, reconoció ayer el presidente Enrique Peña Nieto.
Durante la inauguración del Foro Internacional “Equidad para las víctimas en el debido proceso”, apuntó que se debe revisar el modelo que aplica el país, “que aunque es referente en el mundo por ser uno de los primeros, tenemos que perfeccionarlo para asegurarnos que funcione adecuadamente”.
Reconoció que se pone de manifiesto la inoperatividad de la Ley General de Víctimas en algunos casos.
“El modelo ha mostrado un avance, pero no es suficiente, ni en el orden federal y menos aún en los estatales”, subrayó el mandatario.
Luego de recibir de Isabel Miranda de Wallace, presidenta de la asociación civil “Alto al secuestro”, una iniciativa para crear la Ley Nacional de Víctimas, el jefe del Ejecutivo indicó que ha recibido señalamientos de fallas e inconsistencias, que hacen inoperable el modelo vigente.
Entre los retos y desafíos que afronta el país se encuentra el de ajustar las normas, modernizar los marcos normativos, pues “no basta con tener buenos ordenamientos, lo que realmente hace el camino es la eficaz aplicación de estos ordenamientos. La ley por sí misma no transforma la realidad, sino la eficaz aplicación”, enfatizó.
Peña Nieto mencionó que una de las inconsistencias que se denuncian es que el fondo de ayuda, asistencia y reparación del daño se utiliza para apoyar a los victimarios que invocan faltas al debido proceso, en lugar de que sea destinado a ayudar a las víctimas.
“Esto tendremos que corregirlo; he recogido sus planteamientos, peticiones, y creo que los titulares de los otros Poderes, especialmente el Legislativo han hecho lo propio”, dijo sobre este tema el titular del Ejecutivo federal a los integrantes de asociación civil que hicieron propuestas para revisar el modelo de atención a víctimas.
Apuntó que se tiene que revisar este modelo que “para fortuna, México fue uno de los primeros países que tuvo un modelo de atención a víctimas” y debe perfeccionarse para evitar la burocratización, que haya ágil y fácil acceso de los afectados a la reparación del daño.
Asimismo, que cuenten con la debida asistencia jurídica por parte de abogados victimales que, como lo señaló Isabel Miranda de Wallace, no son suficientes en ninguno de los órdenes, y en ocasiones tiene más capacidad el inculpado que las víctimas.