Tijuana, Baja California.- Los drones de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal (SSPCM) han realizado tres mil 819 operaciones aéreas, volado mil 208 horas y asegurado más de 200 presuntos responsables de delitos junto con policías municipales certificados para su manejo, todo dirigido bajo el mando de un capitán. 

Estas máquinas funcionan de un modo ágil y con discreción. En concreto, representan una ventaja a la vista para realizar operaciones precisas, destacó el capitán Eduardo Sarquiz Ruvalcaba, jefe del Centro de Control de los Vehículos Aéreos No Tripulados (VANT), quien fuera piloto del helicóptero Pegaso durante 18 años. 

Tan importante es la adquisición de estas unidades que, de acuerdo con datos de la SSPCM, el total del costo por hora de operación de un dron equivale a 330.80 pesos, mientras que el mismo concepto de costo-hora por la renta de un helicóptero es de mil 300 a mil 500 dólares; es decir, 29 mil 669.2 pesos con una cotización del dólar a 20 y con el costo máximo de mil 500 en moneda americana. 

“Nuestra ventaja es que tenemos un tiempo de respuesta de minuto a minuto y medio, porque al estar en el aire se pueda brindar información más precisa sobre la misión realizada al momento”, confirmó el mando.

Los también llamados abejorros o RPAS (sistema de aeronave pilotado a distancia, por su nombre en inglés) son aeronaves de fabricación china, considerados excelentes modelos. Son drones marca DJI, Modelo Matrice 200 v2, con una duración de vuelo de 38 minutos de acuerdo al fabricante, aunque son 25 minutos reales, de acuerdo al trabajo operativo o a las condiciones climatológicas. 

Los aparatos cuentan con un par de cámaras. La primera es térmica y detecta todo tipo de movimiento durante la noche, bajo el agua o entre varias estructuras; y la segunda detecta más a fondo otro tipo de movimientos, como placas o hasta pequeños objetos. Estas capacidades facilitan el trabajo policiaco. 

El Centro de Control de los VANT cuenta con diez oficiales certificados por la empresa CAPE, con más de 70 horas de teoría y práctica. Cada equipo se integra por 3 operadores: piloto de sistema, piloto de campo y piloto controlador, quienes en conjunto han logrado mil 181 horas 57 minutos horas vuelo en menos de dos años, lo que significa un promedio de 2 horas con 30 minutos al día. 

Cada trío opera un dron con una función específica planeada desde la plataforma de despegue, lugar donde se logra una elevación y duración necesaria, para cumplir con los resultados que han sido un punto de apoyo para los oficiales “de a pie”, cuando los responsables huyen a lugares de difícil acceso.

Sarquiz Ruvalcaba especificó que así lo implementó la Secretaría de Seguridad y se han logrado excelentes resultados como la detección de la compra y venta de sustancias ilícitas en el área de la canalización del Río Tijuana, una de las zonas que dejó de ser un foco rojo para el municipio. 

De igual manera, contribuyen a verificar los reportes como la portación de armas de fuego, detonaciones, persecuciones, volcaduras, incendios, concentración de personas, entre otros. Es el futuro para la seguridad, afirmó el capitán. 

Con base en la Norma Oficial 107-SCT3-2019 y los parámetros de la corporación policiaca, los drones pueden viajar a un máximo de 2 mil 100 metros de distancia, a una altura máxima de 122 metros y mínima de 100, utilizados únicamente para dar respuesta a los reportes de la línea de emergencia 911. Las aeronaves alcanzan una distancia de ocho kilómetros con una velocidad de 44 kilómetros por hora sin obstáculos y una altura de 3 mil metros sobre el nivel del mar. 

Estos aparatos, aunque de gran utilidad, de ninguna manera sustituyen a los seres humanos, pero sí representan una herramienta clave utilizada a favor de los oficiales, por lo que se prevé la expansión de drones en cada una de las delegaciones de Tijuana.