ENSENADA. – La fuga de agua registrada en días pasados en el sur de la ciudad de Ensenada no es responsabilidad de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (CESPE), aclaró su titular, Jaime Alcocer Tello, quien puntualizó que la línea pertenece a Aguas de Ensenada, empresa que opera la planta desaladora, y agregó que no se hizo reparación inmediata porque se corría el riesgo de suspender el suministro de la población durante varios días.
Por lo tanto, el funcionario estatal puntualizó que el reporte del Ayuntamiento de Ensenada fue impreciso, ya que no era un tema particular de la CESPE, además de que el personal municipal no se comunicó primero acerca del origen del problema, lo cual también es una falta de responsabilidad de dicha instancia.
Alcocer Tello pidió a los ensenadenses tener paciencia y comprender que son situaciones ajenas al organismo operador de agua, que tiene toda la disposición para resolver puntos críticos, ya que el suministro es una prioridad de la administración.
Señaló que lo más conveniente es que la actual administración municipal designe a un enlace para establecer la coordinación, a través del cual notifiquen a la autoridad estatal lo que detecten, además de informar a los trabajos que pretenden realizar.
“Esa línea depende de la empresa Aguas de Ensenada, que opera la planta desaladora, y la fuga se les notificó con tiempo, pero esa compañía concentró sus esfuerzos en la reparación de la toma directa para poder recuperar todo el sistema, debido a que actualmente sólo bombean 110 litros por segundo”, explicó.
El director de la CESPE agregó que se trata de una caja de válvulas que no se puede solucionar tan rápido, porque es un tubo de fibra de vidrio, y que por lo tanto se necesitaban 48 horas para repararlo.
“Por el momento, personal de la empresa Aguas de Ensenada efectúa los preparativos para que este lunes 10 de enero a primera hora comiencen los trabajos de reparación de esta importante línea”, anunció el titular de la CESPE.
Ellos, apuntó, estaban considerando que esto se podría llevar a cabo cuando se hicieran las obras de interconexión, y la fecha probable era el 20 de enero, pero representaba demasiados días.
“Por tal motivo, se valoró que, si bien era una fuga, era más importante que el agua le siguiera llegando a la población, para que las familias tuvieran agua en sus casas, y eso fue lo que se avaluó y se estableció como prioridad; por eso Aguas de Ensenada no efectuó de inmediato la compostura, porque implicaba suspender el suministro en muchos hogares”, recalcó.
Respecto a la calidad del agua que se suministra después de efectuar reparaciones en las redes, explicó que, a pesar de las fugas, producto de cinco apagones, se hicieron seis reparaciones con el acueducto en operación.
En ese sentido, dijo que “cuando los tanques pierden su nivel de agua, en el fondo se acumula azolve, y que al quedarse sin agua (los tanques) ese azolve se introduce por las líneas, y esa agua turbia es la que sale cuando se reactiva el sistema, pero sólo hay que dejar correr unos pocos minutos el agua, que se puede depositar en recipientes, para que la aprovechen para sus baños, plantas y jardines”.
En cuanto a la fuga que se registró en la Calzada las Águilas, Alcocer Tello informó que el Ayuntamiento efectuó labores que provocaron la ruptura de una línea, “pero demostramos que tenemos la capacidad para responder pronto ante circunstancias que no provocamos”.
“No hemos reclamado nada, por eso exhortamos al Ayuntamiento para que se coordine y se eviten este tipo de situaciones que afectan el servicio a las y los ensenadenses”, reiteró.