MEXICALI.- Un total de 23 migrantes que permanecían cautivos desde hace varios días en una vivienda ubicada en la colonia Hidalgo, fueron liberados por elementos de la Policía Estatal Preventiva y el Instituto Nacional de Migración, quienes además detuvieron a cuatro personas.

El incidente se dio al filo de las 15:12 horas según informa el reporte oficial de la PEP, el cual agrega que todos los rescatados son de origen hondureño, salvadoreño y guatemalteco, quienes se encontraban aquí en búsqueda del idolatrado sueño americano.

Elementos del INAMI solicitaron el apoyo de la PEP, pues tenían información referente a la presencia de un numeroso grupo de indocumentados que permanecían privados de su libertad al interior de una casa establecida sobre la calle Hudson, en la mencionada comunidad.

Los preventivos sostenían patrullajes sobre la zona y a la altura del inmueble marcado con el número 2356, notaron la presencia de una persona a bordo de una motocicleta Honda, modelo 1983, el cual mostraba, dicen, una “apariencia sospechosa”.

Por este motivo detuvieron su marcha y descendieron de las unidades, por lo que este hombre intentó regresar al predio de su propiedad, pero fue intervenido antes de pisar el interior.

Los uniformados sometieron a quien dijo llamarse Adolfo Demara Reyes, de 38 años de edad, el cual fue sometido a una inspección sin encontrarle nada ilegal.

Sin embargo, al cotejar los datos de la unidad motora en el Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4), se descubrió que era robada, por lo que comenzaron los cuestionamientos hacia su persona.

El tipo admitió ser guardia de unos indocumentados que se encontraban en la casa ubicada frente a ellos, labor que realizaba junto con otras tres personas.

De inmediato se solicitó el refuerzo de más elementos y “reventaron” la vivienda en cuestión, donde localizaron a 8 personas en su interior, la mayoría de ellos migrantes centroamericanos.

Los otros tres sujetos detenidos son Juan Ángel Gustavo Estrada Gallardo, de 18 años, Blanca Estrada Gallardo, de 38 y Fernanda “N”, de 17, los cuales confesaron que había otra vivienda ubicada en la calle Lago Mead, de la misma colonia,donde se resguardaba a otros “pollos”, por lo que se trasladaron al sitio y confirmaron lo referido por los delincuentes.

En total son 23 personas originarias de El Salvador, Guatemala y Honduras, las cuales fueron puestas a disposición de las autoridades federales para que se hagan cargo, mientras que los cuatro sujetos, todos de origen mexicano, fueron llevados a las instalaciones de la Procuraduría General de la República, donde se determinará su situación legal.