MEXICALI.- El dirigente de la Sección 2 del SNTE, Rogelio Alejandro Gudiño Valenzuela responsabilizó directamente a las autoridades educativas de estar violando la ley al no nombrar directores. Defendió la actuación de los supervisores al entregar las llaves de 434 por carecer de directores y advirtió que si la autoridad los llega a sancionar, el sindicato interpondrá denuncias penales, civiles y administrativas contra el sistema educativo al no cumplir con su obligación de garantizar las condiciones mínimas fijadas en ley para operar un plantel.

Esto lo señaló el dirigente magisterial luego que la autoridad educativa señaló que los inspectores podrían ser sujetos a responsabilidades y hasta perder su empleo por abandono de labores.

Gudiño Valenzuela volvió a citar el apartado b) del del artículo sexto del Acuerdo 717 emitido por el Titular de la Secretaria de Educación Pública en el país el pasado viernes 7 de marzo del año en curso para mejorar la calidad de la educación, que establece:

“Normalidad Mínima de Operación Escolar. Asegurar que las escuelas cuenten con los siguientes rasgos básicos:”

“Todas las escuelas deben brindar el servicio educativo todos los días establecidos en el calendario escolar, para ello las autoridades educativas locales y municipales deberán asegurar que las escuelas cuenten con el personal completo de la estructura ocupacional correspondiente, desde el inicio hasta la conclusión del ciclo escolar y evitar que se tenga personal por arriba de la estructura autorizada;”

Abundo que la Ley General del Servicio Profesional Docente en su artículo sexto transitorio y la Ley del Servicio Profesional Docente del Estado de Baja California, que aún no se pública, en su artículo cuarto transitorio, establecen: “En tanto no se tienen implementados y en operación los concursos y los procesos de evaluación a que se refiere el artículo anterior, se estará a los previsto en las disposiciones aplicables hasta antes de la publicación del presente Decreto,…”

Por la que la autoridad debió haber boletinado las plazas vacantes desde que estas quedaron vacantes y conforme lo acordaron y firmaron por escrito el pasado 15 de enero de 2014, en las oficinas con que cuenta el SEE en las calles de Obregón.

Adicional a lo anterior existen otras 290 escuelas que no cuentan con Director efectivo desde su creación y en muchas de ellas sin intendente, secretarias, prefectos en el caso de secundarias, por lo que uno de los maestros de la escuelas tenían que cubrir su grupo y la Dirección sin ser esta su función y obligación, y sin embargo lo venían haciendo con el ánimo de apoyar al SEE sin embargo ya se cansaron que escuelas con más de ocho años que se abrieron a la fecha no tengan Director Efectivo y por eso se decidió entregar las llaves de 102 escuelas en Mexicali; 28 en Tecate; 144 en Tijuana; 15 en Rosarito; 51 en Ensenada; y 94 San Quintín; para un total de 434.

Quién está faltando a la ley entonces y quién incurren en responsabilidades, se preguntó Gudiño Valenzuela y respondió: Los inspectores no, porque no están obligados a lo imposible. A quién supervisan, si su actuación está directamente enfocada a la labor de un director como responsable de un plantel.

Es evidente que es la autoridad la que está fallando, prosiguió Gudiño. El SNTE dijo, está en sus derecho de defender a los maestros que cubren direcciones en calidad de interinos y hacerlo con retroactividad a los años que llevan en esos cargos, demandar penalmente a la autoridad por no cumplir con las obligaciones que tiene de dar las condiciones óptimas para que opere un plantel y administrativa por negligencia al no boletinar las plazas vacantes para cubrir esos vacíos, como es su obligación.

El SNTE prosiguió ah mantenido una colaboración abierta y pedido a los maestros que atiendan actos que no les corresponden como es el caso de por lo menos 35 funciones distintas que conlleva el cargo de director de una escuela a las que le suma la clase ante el aula. Llegado el caso, dijo, el sindicato les podrá pedir que dejen completamente de lado las aulas y se asuman como directores y se dejarían sin clases más de un millar de salones y exigir de paso a la autoridad el pago total que implica ser director.