Indira Mata A-Firma
Mexicali, B.C.- La verificación vehicular seguirá siendo obligatoria en Baja California aún y cuando las autoridades ni siquiera logran en primera instancia la revisión bajo este programa de sus flotillas de vehículos, patrullas, bomberas y otras unidades públicas que transitan en pésimas condiciones. Ah! y a esto se suma el transporte público -concesionado por el mismo gobierno- que está exento de la medida anticontaminante.
Mientas tanto nuestra atmosfera dañina se agrava cada vez más porque de un plumazo nunca será posible desaparecer las emisiones provocadas por otras fuentes que afectan también al medio ambiente como el polvo de calles sin pavimentar, combustión de pollerías y taquerías, emisiones de las plantas termoeléctricas, quema de parcelas, de basura, de llantas, emisiones de industrias, las plantas de tratamiento de aguas residuales, contaminación de drenes y una larga lista de acciones que siguen generando graves daños a nuestra salud.
Los datos duros de la contaminación son realmente preocupantes independientemente de las fuentes oficiales y no oficiales: El Programa Para Mejorar la Calidad del Aire en Mexicali 2011-2020 que fue presentado recientemente por el gobierno estatal señala que independientemente de la contaminación que generan los automóviles por bióxido de carbono (C02) y de partículas PM 2.5 y PM10, en este tipo de contaminantes dañinos el polvo de caminos sin pavimentar aporta un 52.1 por ciento de estas partículas y la quema de campos agrícolas un 18.8 por ciento.
Investigaciones independientes realizadas por activistas contra la verificación vehicular como el ingeniero Temoc Avila indican que las termoeléctricas Intergen y Sempra generan todos los días toneladas de dióxido de azufre (S02) que al combinarse con la humedad forman la lluvia ácida que daña los cultivos y en el tejido pulmonar provoca edema conocida en términos médicos como hidropesía así como dióxido de nitrógeno o ácido nitroso (NO2) que es prácticamente letal para las personas.
Pero entre más se indaga más se encuentra, la diputada tecatense Nereida Fuentes expuso esta semana que el inventario de la ciudad de Mexicali de drenes en desuso es de 23.5 kilómetros y que casi en su totalidad son depósitos clandestinos de basura y focos de infección donde prolifera fauna nociva, desde ratas, moscos y garrapatas.
La actividad ganadera y su estiércol produce gas metano (CH4) y se calcula que una vaca de 500 kilogramos de peso puede generar entre 400-450 litros de gas metano por día.
A diferencia de nuestros vecinos más cercanos de Valle Imperial, California, las empresas de engorda de todo el condado depositan en la planta de gas metano el estiércol del ganado que contribuye a la generación del gas natural, y que en buena parte –y de manera muy inteligente- nos comercializan a través de la empresa denominada Ecogas de Mexicali.
Ni hablar... no cabe duda que en la cuestión de verificación vehicular no sólo es necesario tener la razón legal y jurídica, sino también es indispensable la autoridad mora que se traduciría en empezar como el buen juez, que por su casa empieza.
