Boicot

Decidido a boicotear la muy urgente modernización del transporte público, el ex subdirector de Vialidad y Transporte de Tijuana Juan Gabriel Lemus Torres realiza maniobras propias de marioneta manipulada por algún misterioso (y poderoso) panista.

Y es que --en su necia postura de impedir el proyecto denominado Ruta Troncal--  se combina la resistencia a la modernidad con el juego de ambiciones político-partidistas que parecen más importantes que el bienestar ciudadano.

Para entender esta maraña de intereses oscuros (que impiden la modernidad del transporte público de Tijuana), baste decir que don Gabriel Lemus es ahora representante de una línea de transporte que por años se ha dedicado exclusivamente a retacarse los bolsillos.

Los acaparadores de las rutas, se hinchan de dinero pero no invierten un sólo centavo en la modernización de su parque vehicular. Los camiones que actualmente circulan por la ciudad, en su tiempo debieron ser el orgullo del dictador Porfirio Díaz. 

Esos pulpos del transporte quieren sostener su mina de oro sin pagar impuestos y sin ofrecer un servicio digno y de calidad para los ciudadanos. En palabras sencillas, a los dueños de las empresas transportistas les vale verdura la necesidad de la gente.

Reunidos el jueves para analizar el tema de la Ruta Troncal, los transportistas se dedicaron a criticar el proyecto y a manifestarse en desventaja. Al menos 2 de los 12 presentes mantuvieron un desacuerdo patológico.

Conocedor de los vericuetos gubernamentales, Lemus Torres se levanto de su silla y amenazo con reventar la sesión al abandonar el sitio. Uno de los presentes confió a Cicuta que ante la insolente  actitud de Lemus, el secretario general de Gobierno Bernardo Padilla lo acribillo con la mirada y sin medir las consecuencias “le ordeno” sentarse.

El testigo recuerda que Gabriel Lemus es “un viejo lobo de mar” pues despacho como sub director de Vialidad y Transporte durante el trienio del panista Jorge Ramos Hernández.!De funcionario paso a transportista!

Durante esos tres años fueron muchísimos los señalamientos contra Gabriel Lemus por tan descarados actos de corrupción durante esa gestión. Allí brotaron la re-venta de permisos de taxi y el escandaloso fenómeno de los taxis clonados. A Lemus se le achaca la venta de permisos que ya tenían dueño y que estaban vigentes.

El escándalo lo destaparon los dueños de permisos de taxi que se enteraron que Lemus los vendió porque no habían realizado la revalidación en tiempo y forma.

Consentido del entonces alcalde, Lemus Torres se frotaba la panza de la risa ante el caudal de señalamientos en su contra. ¿Cómo entender que durante los tres años de gobierno desfilaron 4 directores de Vialidad y Transporte ¡Y Lemus Torres ni se inmutaba!

Los propios empleados afirman que los directores Raúl Ramos Popoca, Abel Mora Rodarte, Luis Alonso Morllett y Jorge Bibi Gutiérrez fueron simples títeres frente a las desaseadas y descaradas maniobras de Lemus.

De regreso al jueves, ante la mirada asesina de Padilla, don Gabriel Lemus debió recapacitar y acabó por sentarse con sus manitas juntas entre sus rodillas. Si Lemus responde a la instrucción de un influyente panista y al mismo tiempo representa los intereses de una empresa transportista ¿No arriesgaba la concesión?

Entre la docena de empresas convocadas a la reunión, solamente Lemus y otro personaje con careta de comparsa, manifestaron su oposición. El resto de los transportistas saben que el gobierno federal gestionará créditos para comprar camiones nuevos. Los viejos transportistas acostumbran amontonar sus ganancias diarias sin realizar contribuciones fiscales o invertir en beneficio del usuario.

Ah por cierto. también se fueron a la yugular del representante de la empresa Altisa, porque cobran 4 pesos menos a los pasajeros de su ruta y utilizan camiones modernos. ¿Y estos que se creen? Cicuta desconoce la identidad del influyente panista que usa a Lemus como su pistolero, aunque está cerca de identificarlo.

Blásquez

Una soberana patiza  le pusieron el Facebook (la semana pasada) al senador bajacaliforniano Marco Antonio Blásquez Salinas. Con su experiencia en medios de comunicación, el señor Blásquez debía mantener un bajo perfil con la esperanza que los habitantes de esta entidad se olvidaran de su escandalosa abstención en la reforma fiscal. Esa abstención tatuó a Blásquez. 

El senador “posteo” una imagen para informar que “su voto fue en contra de las leyes secundarias en materia electoral”. Ese voto en contra “incluyó la oposición a la pensión vitalicia propuesta para los magistrados del tribunal electoral”.!Gracias señor senador!

Los agravios contra Blásquez recuerdan la famosa abstención. El facebookero Luis Mario Hidalgo le puso: “así como presume este voto también debería subir la foto que cuando traicionaron a su estado”. Otros se arrepientes de haber votado por él, mientras alguno lo tacha de hipócrita. Blanquita Ortega, dama elegante, le dice dulcemente “no tienes vergüenza” y “José Antonio” le pregunta lapidario ¿ y qué tal tu voto a favor del aumento al IVA, rata traidora?