Por: Juan Castro López.
Tijuana, Baja California
Las Escuelas Normales Rurales han sido sólidos pilares de la educación en México, jóvenes que se han formado para enfrentar los más serios problemas educativos en las regiones más intricadas de las verdes montañas del país, la población de estudiantes Normalistas lo forman hijos de campesinos, obreros y otros sectores cuyo único delito es haber nacido en la pobreza y en no pocos casos en lo más humillante de la miseria.
Fue el ‘Tata’ Lázaro Cárdenas del Rio siendo Presidente de la República (Él si fue Presidente, no como otros) ordenó la creación de estas instituciones para la formación de Maestros para que contribuyeran al exterminio del analfabetismo, un flagelo que humilla al ser humano estancándolo en sus sueños y coartando sus máximas aspiraciones de un triunfo e indefinido éxito en el desarrollo de su creatividad humana hasta convertirlo en un miserable esclavo de los poderosos, un esclavo de quienes han perdido la razón por la soberbia y su maldita ambición de poder a costa del dolor y de la sangre humana quienes afilan sus garras como fieras envilecidas husmean las condiciones del desposeído.
Miles y miles de maestros somos hijos del Normalismo Rural Mexicano (a mucha honra) y lanzamos un grito de orgullo por haber participado por años en la formación de los niños guiándolos por el mejor de los senderos y tal pareciera que ESO no les gusta a los señorones del dinero creadores del Neoliberalismo, esto es un maligno y espeluznante bastón donde se apoyan para lanzar improperios contra los estudiantes Normalistas.
Desde la época del repudiado presidente Díaz Ordaz se inició una feroz lucha contra las 32 Escuelas Normales Rurales existentes en el país con la finalidad de desaparecerlas y sistemáticamente fueron atacadas por los distintos medios de información al servicio de gobierno, con el miserable ardid de que las escuelas eran verdaderos centros de comunistas dirigidos desde la URSS, que eran escuelas generadoras de la violencia y creadores de las nuevas guerrillas en México.
Es bien cierto y por todos los Normalistas conocido de que existieron hombres bien formados en ideologías distintas a la de los hambreadores del pueblo y que lucharon en distintas épocas por los derechos civiles del ser humano y ahí tenemos al mismo ‘Tata’ quien repartió la tierra convirtiéndolas en ejidos para que los pobres del campo tuviera donde sembrar, lo mismo hicieron otros maestros Normalistas como Othón Salazar, Pablo Gómez, casi por las mismas fechas kos maestros Gilberto Lozano y el reconocido Santos Valdez (Maestros de la Normal Rural de San Marcos Zacatecas así como como los Profesores J Jesús Valdez Robles y Crescencio Gernández ( Xalisco Nayarit ) quienes ideológicamente y con rudeza enfrentaron a la SEP; ya en los sesenta y setenta, los guerrilleros profesores Lucio Cabañas Barrientos en la montaña de Guerrero, lugar donde fue acribillado salvajemente a tiros por el disque glorioso ejército mexicano, el maestro Genaro Vázquez un guerrillero urbano también muerto a tiros por el ejército y según la prensa vendida dijeron que había chocado en un puente camino a Morelia.
Más tarde (Septiembre 1965) otro grupo de maestros Normalistas decidieron ofrendar su vida en la guerrilla contemporánea, hartos de tantas pinches injusticias en el país avaladas por el gobierno en turno atacaron el cuartel de Madera, Chihuahua con escasas armas y sin entrenamiento profesional pero con un corazón así de grande trazaron un plan de ataque en la madrugada del 23 Septiembre (Liga 23 de Sept.) donde cae muerto los Normalistas Rurales Arturo Gámiz García y su hermano el estudiante Emilio Gámiz García, cae de igual forma el médico y maestro de la Normal de Saucillo, Chih. Así como el estudiante Oscar Miguel Quiñones. Otros más fueron hechos prisioneros sufriendo las peores torturasal puro estilo mexicano, tales como el maestro Mexicalense José Luis Alonso Vargas quien fue herido a punto de muerte; poco tiempo después el grupo de Normalistas son asilados en Ciudad Habana.
Pero lo que no tiene madre, es lo sucedido el 26 y 27 de octubre 2014 con nuestros compañeros de Ayotzinapa donde fueron acribillados a mansalva dos estudiantes y 43 más desaparecidos por el narco-gobierno; donde la policía de Iguala recibe órdenes de disparar a los indefensos muchachos.
Hoy 43 madres siguen derramando lágrimas por los surcos Guerrerenses con la esperanza de que el espurio-sátrapa e hijos $%·$%& gobierno los entregue vivos así como se los llevaron y si esto no sucede así, el odio de los pueblos de México y del mundo entero rechazaremos por siempre EL CRIMEN DE ESTADO DEL SIGLO XXI para vergüenza del país que también llora.
Por todo lo anterior digo a grito abierto que los Normalistas de México también lloramos!!!!
Con saludos