TIJUANA.- Cuatro de cada 10 pacientes con cáncer infantil se complican por los efectos secundarios de la quimioterapia que pueden afectar órganos vitales como el corazón, pulmones o los riñones.
El estado nutricional y la historia de vida de los pacientes oncológicos pediátricos es determinante a la hora de propiciar complicaciones, sobre todo si se toma en cuenta que algunos de los atendidos en la Fundación Castro-Limón no sólo provienen de lugares muy pobres, sino también con características insalubres.
Así lo estableció Pedro Cruz Camarena, director de la Fundación Castro-Limón para la atención de niños con cáncer a través del Centro Oncológico Pediátrico de Baja California (COP).
Recordó que el cáncer es una alteración celular que contempla un tratamiento a base de quimioterapia que por un lado ataca las células malignas y por otro ocasiona efectos secundarios.
A pesar de ello, cada año se gradúan de cáncer infantil 10 niños del COP y se tiene 87 por ciento de sobrevida en leucemias y 70 por ciento en cánceres en general.
Cruz Camarena subrayó que se mantiene la incidencia de entre uno y medio y dos casos nuevos por mes. El ingreso es similiar al de otros años y las gráficas indican que entre los seis y 12 años de edad se encuentra el rango de mayor cantidad de cáncer infantil.
A pesar de que Castro-Limón brinda atención exclusiva a menores de edad, Cruz Camarena asentó que tienen pacientes que se han graduado hasta los 24 años, debido a que comenzaron su proceso casi para convertirse en adultos.
Además, se han dado casos extraordinarios de atención de pacientes hasta los 18 años y 11 meses debido a que a pesar de que tienen una edad cronológica determinada, sus características físicas son de una persona más joven y pueden someterse a los protocolos para atender cáncer infantil. (lgs)