TIJUANA,B.C.- Comprometida con salvaguardar la integridad de los menores migrantes que transitan por territorio bajacaliforniano, la Presidenta del DIF Baja California, Brenda Ruacho de Vega, recibió la visita de la representante de Human Rights Watch (HRW por sus siglas en inglés), Clara Long, como parte del trabajo coordinado que la administración que encabeza el Gobernador Francisco Vega de Lamadrid efectúa para la protección de los diferentes sectores vulnerables.
“Es muy importante apoyar estas iniciativas, que permitirán mejorar el trato para nuestros niños migrantes y sus padres, la unión hace la fuerza”, expresó Ruacho de Vega durante la reunión llevada a cabo en el Módulo de Recepción y Atención a Niñas, Niños y Adolescentes Migrantes y Repatriados No Acompañados que opera DIF Baja California.
Mencionó que la entidad es un territorio por el que muchos migrantes mexicanos intentan cruzar a Estados Unidos en busca del llamado “sueño americano” y cuando no lo logran permanecen en Baja California, razón por la cual el gobierno estatal les brinda apoyo para regresar a su lugar de origen, en especial a aquellos menores que viajan sin la compañía de algún familiar adulto.
Para tal efecto, Ruacho de Vega comentó que DIF Baja California cuenta con dos módulos ubicados en Tijuana y Mexicali en donde a los menores se les brinda el cuidado y protección que requieren, en tanto se reúnen con sus familiares.
Destacó que Baja California ha sido punta de lanza desde hace más de 10 años en temas de atención a menores migrantes, ya que estos módulos especializados fueron los primeros en operar en la franja fronteriza y en beneficio de este sector de la población.
El Módulo de Recepción y Atención a Niñas, Niños y Adolescentes Migrantes y Repatriados No Acompañados recibe al mes aproximadamente a 80 menores deportados, de hasta 18 años de edad, en su mayoría provenientes de Michoacán, Guerrero y Veracruz, de los cuales el 70% se logran reintegrar rápidamente con su familia en los primeros días de su deportación, agregó.
La representante de HRW, Clara Long, realizó un recorrido por las instalaciones del módulo localizado en Tijuana donde conoció el trabajo que diariamente se realiza y el proceso de reintegración de los niños con sus familias, ya que desde mayo de 2015 la asociación inició con el programa de investigación sobre el trato que reciben los menores migrantes mexicanos por parte de las autoridades estadounidenses, el proceso de deportación y sus experiencias en el intento de cruce.
Uno de los objetivos de HRW es recabar los casos de abusos de las autoridades norteamericanas y demostrar la frecuencia con que éstos ocurren, ya que con la información obtenida se podrán solicitar cambios en la política, así como acciones que promuevan los derechos humanos y la justicia.