Al cumplirse tres días del devastador terremoto de 7.8 grados en la escala de Richter que azotó la costa norte de Ecuador, las probabilidades de encontrar sobrevivientes bajo toneladas de escombros se redujeron ayer, a pesar de los esfuerzos de socorristas, informó el ministro de Defensa, Ricardo Patiño, al agregar que el número de muertos aumentó a 480, más de 4 mil 605 heridos y 231 desaparecidos.
El funcionario dijo que ésta es la peor tragedia que enfrenta Ecuador desde hace cuatro décadas, y que al país le costará muchos años recuperarse.
Al respecto, el presidente del país, Rafael Correa, que recorrió las zonas afectadas por el sismo del pasado sábado, dijo que “va a ser una lucha larga, no nos engañemos, las pérdidas son multimillonarias. Yo calculo, a grosso modo, unos 3 mil millones de dólares. Dos puntos, tres puntos del Producto Interno Bruto”, destacó.
BÚSQUEDA. Correa lamentó la pérdida de vidas humanas y dijo que en proporción de habitantes la localidad de Canoa, en el norte, es la más golpeada por el terremoto, pues el 80 por ciento de ese balneario desapareció.
En tanto, equipos de rescate de nueve naciones, apoyados por perros entrenados y potentes excavadoras, buscaban ayer más sobrevivientes entre montañas de escombros y fierros retorcidos.
MORGUE. Precisamente ayer, los bomberos de Quito rescataron con vida a tres personas que estaban atrapadas en un centro comercial que colapsó en la ciudad de Manta, provincia de Manabí.
En Portoviejo, el incólume estadio de futbol sirve de centro de refugio para damnificados, centro de acopio y de improvisada morgue.
“Ayer (martes) cumplimos tres días, que es lo establecido, de acuerdo a los protocolos internacionales, para descartar que personas sigan con vida”, dijo el ministro del Interior, José Serrano, en Pedernales, la región más golpeada de las ciudades ecuatorianas.
RéPLICA. En tanto, ayer una réplica de 6 grados de magnitud volvió a sacudir la zona del norte de la costa de Ecuador, reportó el Instituto Geofísico (IG) de la Escuela Politécnica Nacional, al destacar que el sismo se sintió de manera leve en Quito, a 160 kilómetros al este de la zona epicentral, así como en las costeras de Guayaquil y Manta.
Hasta el momento se han registrado 436 réplicas del sismo principal, que ocurrió a las 18:58 horas locales del sábado, entre las poblaciones de Pedernales y Cojimíes, en la provincia de Manabí, colindante con Esmeraldas, que también fue castigada por la sacudida.
Obama promete “toda la ayuda posible”
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, conversó ayer vía telefónica con su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa, para expresarle sus condolencias por el terremoto que sacudió el pasado sábado su país, y le prometió que hará “todo lo posible” para ayudar a la recuperación de Ecuador tras el desastre.
Un equipo de la Agencia para el Desarrollo Estadunidense (Usaid) llegó a Ecuador para ayudar en la distribución de ayuda de emergencia a la población afectada, informó ayer el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, en su conferencia de prensa diaria.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, telefoneó también a su homólogo ecuatoriano, el canciller Guillaume Long, para comunicarle la llegada de ese equipo, que proviene de la oficina de Asistencia a Desastres en el Extranjero de Usaid.
Estados Unidos está “dispuesto y preparado para proporcionar cualquier otra asistencia” a Ecuador, “de acuerdo con sus necesidades y según lo soliciten”, aseguró el portavoz del Departamento de Estado.