El senador de Texas, Ted Cruz, anunció ayer su renuncia a la carrera republicana tras perder las primarias de Indiana, con lo que deja el camino despejado a Donald Trump para lograr la nominación republicana a las elecciones presidenciales en la Convención Nacional de julio. La victoria del magnate inmobiliario demuestra la fortaleza de su discurso populista y rupturista.
“Dimos todo lo que teníamos en Indiana, pero esta noche los votantes eligieron otro camino. Por ello, suspendemos nuestra campaña”, anunció Cruz, quien apareció acompañado de su esposa Heidi y sus dos hijas, y fue presentado por la también ex aspirante presidencial Carly Fiorina, a quien había elegido para vicepresidenta.
“Debemos unirnos”. Minutos después, el presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que reconoció que el magnate Donald Trump es el “probable nominado” y pidió unidad a los conservadores.
“Donald Trump será el probable nominado del Partido Republicano, debemos unirnos y centrarnos en derrotar a Hillary Clinton #JamásClinton”, indicó Priebus en su cuenta en la red social.
Priebus fue de los primeros en reaccionar a la suspensión de campaña de Cruz, que hasta ahora había sido el gran rival y durante varios meses la única alternativa real a Trump.
La renuncia de Cruz significa que los únicos dos aspirantes que quedan en la contienda republicana son el propio Trump y el gobernador de Ohio, John Kasich, quien tan sólo ha ganado en un estado (el suyo) y quien prácticamente no tiene ninguna opción de arrebatarle la candidatura al magnate.
Tras su victoria en Indiana, Trump está a menos de 200 delegados de lograr la nominación de forma matemática cuando todavía faltan por votar estados tan populosos como California y Nueva Jersey, y evitar así llegar a la convención republicana de julio sin los delegados suficientes, lo que daría pie a una convención disputada.
Sanders otra vez. En el campo demócrata, Bernie Sanders ganó contra todo pronóstico en Indiana a la aspirante favorita, Hillary Clinton, aunque el reparto proporcional sigue beneficiando a la ex secretaria de Estado, que logró una importante ventaja en las últimas primarias y se encuentra, al igual que Trump, a menos de 200 delegados de ser nominada candidata presidencial.
En un hipotético enfrentamiento entre Clinton y Trump, una encuesta de la cadena NBC publicada ayer anunciaba una clara victoria de la demócrata, que se convertiría así en noviembre en la primera mujer presidenta de la historia de EU.