La única salida que tendría el Gobierno federal para hacer frente a la caída de los precios del petróleo y que afectó seriamente las finanzas públicas, es la del aumento al IVA al 20%, consideró el abogado fiscalista, Adolfo Solís.

En entrevista para El Sol de Tijuana, el doctor en Derecho Fiscal indicó que la caída en el costo internacional de energéticos de 79 hasta los 50 dólares, obligará a las autoridades hacendarias a hacer un reajuste en el siguiente Ejercicio Fiscal.

No obstante, Solís Farías comentó que ante la negativa del Gobierno de reducir el gasto de la burocracia, y la poca viabilidad de generar un mayor endeudamiento público, el único camino será incrementar los impuestos indirectos.

"Haciendo cálculos a través de un simulador tributario, el simulador tributario nos dice que para poder compensar el déficit público que hay en el país, la única vertiente que da el simulador es aumentar entre 4 y 5 puntos los impuestos indirectos ya sea IVA, o impuesto especial sobre productos y servicios", explicó.

"Desafortunadamente en México tenemos una administración obesa, y no quererla recortar, el único impacto que queda es en la forma impositiva, y como no pueden seguir pagando los mismos, la única forma para que pague la mayoría es por los impuestos indirectos y es la única forma que puede hacerse", abundó.

Estimó que después de las elecciones del 7 de junio, el Gobierno podría anunciar los cambios, esto para no afectar la percepción de los electores durante el proceso electoral. 

"Una vez que pasen las elecciones se dará el cambio, ojalá el Gobierno sea responsable y haga ajustes a la cuenta corriente, antes de endeudarse o subir impuestos, pero la experiencia nos muestra que no quieren reducir las administraciones obesas y solo lastiman al contribuyente", externó.

Con aumento de impuestos se generaría mayor deficiencia de Estado, trastorno social y mayor desempleo y mayor baja en tasa de crecimiento, y como efecto colateral, mayor cantidad de pobres