Por Sócrates A. Campos Lemus.
En el periodo del 206 al 2012, la famosa guerra contra el narcotráfico, iniciada por Felipe Calderón y Genero García Luna, por instrucciones de los norteamericanos para agandallarse millones de pesos en la compra de equipos y armas y permitirles ingresar, vía contrabando, armas y otros medios para regalarlos a los grupos de delincuentes en el narcotráfico, dizque para que, entre ellos, se mataran, dejando un saldo de más de cien mil asesinados, también, con ese complejo de dictadores llevaron a la cárcel a más de 105 mil mexicanos acusados de actividades ligadas al narcotráfico, de los cuales, solamente, tres mil, fueron llevados finalmente a prisión y condenados, los demás, eran inocentes víctimas de esa perversa actividad desarrollada por Calderón y García Luna, así que a pesar de abusar de su actividad y poder, no tienen que rendir cuentas por esa prepotencia y violencia ejercida en contra de la población para satisfacer los intereses gringos y para robarse millones de dólares en la compra de equipos y armas a los mismos norteamericanos que establecieron esos pleitos ficticios, alentados por los mismos cuerpos de policía mexicanos, para que, asesinado a unos y otros miembros de los grupos criminales, se desatara la guerra entre ellos, y decían que, para eliminarles, no había estrategia mejor que ésta, a pesar de que en la misma se lastimara a miles de inocentes que tuvieron que abandonar sus casas y propiedades y empresas ante la violencia desatada y alentada por el mismo gobierno de Calderón y su pandilla y que, no se encuentren a más de treinta mil desaparecidos, ni se haga justicia a más de 105 mil mexicanos llevados y encarcelados, injustamente, para justificar la guerra contra el narcotráfico y la acción publicitaria a favor de los norteamericanos y de la pandilla gobernante en la época de Felipe Calderón.
Tampoco se les investigará ni castigará por haber permitido que un grupo de policías norteamericanos contrabandearan armas y dinero al país, violando la soberanía nacional y fomentaran los asesinatos entre grupos de mexicanos, y alentaran a los policías locales, para ejercer acciones que aparentaran la confrontación entre grupos criminales, para que, entre éstos, se iniciara una violenta disputa y venganzas en todo el país.
ESA IMPUNIDAD DE LA QUE GOZAN LOS ALTOS FUNCIONARIOS DEL GOBIERNO DE Calderón y él, inclusive, es lo que genera la mayor indignación en contra del gobierno de Peña Nieto, ya que no se han visto las investigaciones y los castigos que deberían recibir esos pillos, no solamente por esos actos criminales y apátridas, sino también porque se tiene documentado los grandes fraudes y las corruptelas en varios negocios que propiciaron y alentaron con los grupos de socios y de cómplices en la industria, comercio, finanzas y de inversores y empresarios extranjeros, con los cuales robaron recursos públicos y se apropiaron de cuantiosos negocios y recursos naturales, que afectan el patrimonio de los mexicanos. Enrique Peña Nieto, se comprometió a iniciar una intensa campaña en contra de la corrupción, y se ha quedado en buenas intenciones o frenado por los compromisos políticos para brindar estabilidad a su mandato y gobierno que, hoy por hoy, luce tambaleante y desorientado, algunos dicen que en una aguda crisis de credibilidad y de gobierno. Por el bien de todos, esperamos que no sea así, y que, cuando menos, se decida a dar golpes de fuerza que demuestren que tiene bien firme el mando y pueda iniciar ,no una “cacería de brujas”, sino una justicia a favor del pueblo de México, y lleve a los tribunales a los funcionarios que hay generado esa intensa crisis y no han respondido por sus robos, corruptelas y asesinatos en contra de los mexicanos,.
Con tal experiencia en la impunidad y en el uso de las policías para las venganzas políticas, en Oaxaca, se descubre que, el Jefe de la policía, también utiliza la fuerza pública para las vendettas personales y políticas con tal de fortalecer al fallido gobierno del estado y culpar a los grupos políticos de oposición al actual mandatario de generar violencia y de estar ligados al crimen organizado, no importando la cantidad de muertos de la policía ni de los ciudadanos a los que agreden en sus comunidades bajo cualquier pretexto. Así que veremos como se genera mayor violencia y se escudan en esa inseguridad para provocar mayor daño a la población que está intranquila, temerosa y horrorizada de lo que sucede en este Estado, cuando ve la impunidad y la prepotencia que se usa para continuar en la rapiña, el robo y la represión, con tal de mantener a un grupito en el poder para continuar jodiendo a los oaxaqueños. Así que, si la policía es usada para la represión política y las venganzas de los grupos y partidos políticos, nos podemos esperar una reacción violenta, generalizada ,que busque justicia y paz social, con libertad y equidad….por un buen gobierno….
