Jaime Flores Martínez /

Enfurecido al descubrir que "alguien" penetró a su departamento para robarle una caja fuerte, el senador priista Héctor Yunes Landa increpó a los vigilantes del complejo habitacional New City en el corazón de la Zona del Río de Tijuana.

Parecía inconcebible que los ladrones hubiesen invadido el departamento numero 1204 de la Torre Diamante de New City sin que nadie se diera cuenta. Al ingresar a su departamento, ni el mismo Yunes sospechó el saqueo pues la chapa de la entrada lucía inviolada. Alguien usó el duplicado de la llave.

Y aunque el senador Yunes nunca reveló el contenido de la mentada caja fuerte, los mal pensados suponen que ahí pudo esconder elementos que pudieran explicar la estrepitosa derrota del tricolor en la elección realizada el pasado 7 de julio.

Antes de iniciarla campaña, el dirigente nacional del PRI César Camacho Quiroz designó al senador veracruzano Héctor Yunes como delegado del Comité Ejecutivo Nacional de ese partido en Baja California. Apenas aterrizó en Baja California, priístas generosos e interesados ofrecieron al senador Yunes instalarlo en un céntrico departamento que le permitiría maniobrar a placer.

Yunes recibió las llaves del departamento número 12 04 de la mencionada torre, donde por cierto habitan personalidades de clase acomodada. Para el Senado Yunes las cosas parecían a modo aunque la situación cambió radicalmente al conocerse los primeros resultados la noche del domingo 7 de julio.

La labor que realizó Yunes en realidad sirvió para un carajo pues Fernando Castro Trenti había sido derrotado por el panista Francisco Vega de Lamadrid. Además, fue incapaz de sacar adelante la elección en el municipio de Mexicali y de Rosarito, pues solamente se rescataron los municipios de Tijuana, Tecate y Ensenada.

El martes 8 el senador Héctor Yunes se levantó muy temprano para comenzar sus actividades y antes de meterse la regadera se asomó por la ventana y aterrado observó que alguien había colocado un letrero que le provocó un sobresalto: “Por tu culpa perdimos perro”, rezaba la cartulina.

Mientras se duchaba Yunes concluyó que el improvisado retablo había sido elaborado y colocado por el llamado “fuego amigo”. No había duda que algunos priístas lo ubicaban como responsable de la derrota prisita. Esos mismos correligionarios que cuestionaron su actitud insolente durante el desarrollo de la campaña política.

El senador veracruzano cerró espacios importantes a priístas locales que buscaban realizar labores importantes en la campaña. Recordó que algunos tricolores bajacalifornianos le cuestionaron la férrea defensa del ex gobernador veracruzano Fidel Herrera, acusado de incurrir en intermitentes actos de corrupción.

Fidel Herrera es un político tan suertudo que se sacó el premio mayor de la Lotería Nacional en dos ocasiones durante su administración. ¡Eso se llama suerte! Otro prisita recuerda que Yunes fue acusado por Fabiola González (ex esposa de su sobrino José Yunes García) de utilizar sus influencias para despojarla de la custodia de sus dos hijos.

César Camacho Quiroz, presidente nacional priista, sacó a Yunes de zona caliente para enviarlo como máximo representante priista a Baja California, donde sacaría adelante los comicios que se realizarían el 7 de julio.

Luego de arribar a Tijuana e instalarse en la Torre Platino se acomodó en un bar y levantó la copa en señal de festejo. Aparentemente los días difíciles habían quedado atrás, aunque ahora el objetivo era llevar al triunfo a Fernando Castro Trenti.

El 13 de julio Castro Trenti reconoció su derrota y con ello la expectativa priista se ubicó en el caño.  Esa misma noche el senador Yunes llegó a su lujoso departamento muy cerca de las 10 de la noche y nunca noto algo extraño, aunque minutos después descubrió que alguien había extraído la caja fuerte donde guardaba artículos de valor.

Personal de seguridad e incondicionales saturaron el departamento de Yunes mientras caminaba de un lado a otro. La especulación giro en torno al contenido de la caja pues los ladrones ignoraron otros objetos de valor.

A través de interposita persona Yunes pidió el apoyo de la Procuraduría General de Justicia del Estado e incluso solicitó la intervención de la Procuraduría General de la República. Al día siguiente  acudió a ambas dependencias a presentar sendas denuncias por el delito de robo.

La tarde del domingo, incondicionales del senador colocaron letreros en los pasillos del complejo departamental donde ofrecen una recompensa de hasta 5 mil dólares. El cuerpo del texto precisa la entrega de “recompensa a la persona que proporcionar información que permita ubicar a quien o quienes, el sábado 13 de julio entre las 13 :30 horas y las 22: 30 horas sustrajeron del departamento 1204 de la Torre Diamante de New City  objetos de valor”.

Para el caso de recuperar los objetos robados, la recompensa será de 5 mil dólares “Toda información proporcionada será tratada de manera anónima y tu identidad quedará protegida”, rezaba el mentado letrero. En la parte inferior fueron colocados dos números telefónicos con el área es la capital mexicana. Vale subrayar que Cicuta tiene en su poder una de las cartulinas colocadas en los pasillos de New City.

Priistas que practican la sensatez levantan los hombros al decir que Héctor Yunes Linares llegó a Baja California con la idea de manipular a un ejército de indígenas tricolores a quienes podía manejar a placer. Muchos de ellos que –por cierto-- se rebelaron se reconocen como el “fuego amigo” que alude  Yunes.

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