Por.- Alfredo Calva
Peña, acotado en su estado fallido………….
Al término de su primer año de gestión y ya consumadas las reformas estructurales, al presidente Enrique Peña
Nieto, ya se le señalaba por diversos sectores de la población como el líder de un estado fallido, obviamente sus cercanos en quienes descansaba en esos momentos la presidencia, Luís Videgaray, Miguel Ángel Osorno Chong y Aurelio Nuño, siempre lo negaron, aduciendo que solo era mala publicidad de quienes no querían que México emergiera como una potencia económica, hoy, la realidad nos muestra y demuestra que Peña Nieto si tiene su estado fallido y que se encuentra acotado por diversos frentes que mantienen al país al borde del colapso.
Los actores y temas que acorralan y acosan al mandatario son, la CNTE con su capricho de derogar la reforma educativa, los organismos en los que se agrupan los miembros de la iniciativa privada, quienes llegaron al límite de la tolerancia por los bloqueos A Las Carreteras y los daños económicos que les han generado los integrantes de la CNTE en Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán.
Y, la mala situación económica que viven la mayoría de los mexicanos, agravada con los constantes incrementos a los energéticos, aunado a la violencia que se registra desde el pasado 2015 en contra de un sector de la clase política, los alcaldes, asuntos en los que su solución se vislumbra muy lejana.
El día de ayer, el presidente nacional de Copar ex, Gustavo de Hoyos, dio a conocer del amparo que ese organismo interpuso ante el Poder Judicial de al Federación en contra del presidente Peña Nieto, los titulares de Gobernación, SEP, PGR, y gobernadores de los estados de Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Ciudad de México y Michoacán, por omisión en el cumplimiento de sus responsabilidades al no poner orden y permitir el bloqueo de las vías de comunicación que actualmente tiene y mantiene la
CNTE en esas entidades y que ya han generado una pérdida de aproximadamente 7,500 millones de pesos.
De igual forma, los integrantes de Concanaco y Servytur, ya alzaron la voz y amenazaron con no pagar impuestos y las cuotas al IMSS y al INFONAVIT, y dieron como plazo al gobierno de Peña Nieto, hasta el próximo día 17 del presente, de lo contrario harán un paro técnico de actividades, lo que pondrá más combustible a la hoguera.
El sector transportista esta en la misma tesitura que los comerciantes y empresarios, a punto de realizará paro de actividades hacia aquella zona del país, lo que cortaría con el suministro de ir su sitio y servicios para los residentes de esas regiones, que por añadidura, son zonas de alta marginación.
Por lo que se refiere al asunto económico el futuro no se ve nada halagador, el alza a los energéticos recién anunciada por el gobierno federal, fue un duro golpe a los bolsillos ya de por sí roídos de los mexicanos, y sin destacar, el incumplimiento de la promesa presidencial de que con la reforma energética aprobada, esos incrementos serian cosa del pasado, el poder adquisitivo de los trabajadores esta por desaparecer, el costo de la canasta básica es cada día mayor, y ya que decir de la devaluación de nuestra moneda.
En cuanto al tema de la reforma educativa, Gobernación y la CNTE, se encuentran empantanados, la dependencia no cede en la derogación y los integrantes de la CNTE exigen su desaparición, y mientras intentan arreglarse como es costumbre en lo oscurito, el sureste del país se encuentra al borde del estallido social.
La violencia en esa parte del país va de la mano con la pobreza extrema que se padece y el fracaso de los gobiernos para combatirla. De acuerdo a las estadísticas de Coneval, de cada peso que los tres órdenes de gobierno aplican al combate de la pobreza extrema, solo 20 centavos llega a su objetivo, es decir, 80 centavos de cada peso se ignora en donde queda, entre los gastos administrativos y los administradores se encuentra esa descomunal diferencia económica, y actuando así los gobiernos, como pueden ser exitosos en el combate a la pobreza.
Todo ello confluye en un solo punto, la ausencia de autoridad moral para aplicar la ley por parte de los gobernantes, los temas de corrupción los anegan, desde la casa blanca, hasta desvío de recursos por varios miles de millones de pesos destinados para obras, tráfico de influencias en favor de sus amigos y familiares, la lista es grande, la administración de Peña Nieto ha sido un fracaso, ha hecho de su gobierno un estado fallido, lo podrá negar, pero no puede demostrar lo contrario, los hechos se lo muestran y ratifican.
Y, lo que es peor, mientras el país se desmorona entre las manos de sus ineptos colaboradores, Osorio, Videgaray, Meade y Nuño, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, se encuentra vacacionando.
El estallido puede esperar.